Tres victorias consecutivas u ocho triunfos en los últimos diez partidos. Son guarismos que sirven para ilustrar, claramente, el gran estado de forma con el cual está acabando la temporada el Mataró Parc Boet. Después del partido de este sábado en casa ante el filial del Girona (71-61), ya solo queda una jornada para poner el punto y final a la competición. El Boet tiene asegurada la quinta posición pero todavía podría escalar hasta la cuarta. El balance total, ahora mismo, es de 15 victorias y 10 derrotas.
El Mataró Parc Boet, que en toda la temporada ha perdido cuatro partidos en casa, volvió a exhibir ante el Girona su habitual fortaleza jugando en la capital del Maresme. Los dos primeros cuartos tuvieron idéntico resultado pero con diferente vencedor del parcial: 19-13 para los locales al principio y 13-19 para el Girona luego para llegar al descanso con un empate (32-32). El tercer cuarto fue el decisivo. El Boet ajustó la defensa y vio la canasta cómo una piscina: 26-12.
Los 14 puntos de diferencia adquiridos después del descanso dieron al Boet la tranquilidad necesaria para gestionar esfuerzos en el último periodo. El Girona B lo intentó, pero el conjunto local controló la voluntad de reacción de su rival (13-17). Al final, el 71-61 permitía al Boet certificar, como mínimo, la quinta posición. El Girona ya queda con dos victorias menos en la clasificación.
El Boet fue muy superior en el rebote (54 a 34). Los cuatro mejores del partido en esta faceta fueron todos del conjunto de Mataró: Fontanet (11), Franch (10), Rodríguez (10) y Álvarez (7). Serra cogió 6, cómo el mejor del Girona B en este apartado (García Xaubet). Antonio Ruiz, que también colaboró dentro de la pintura con 5 rebotes, fue el máximo anotador del partido con 19 puntos.