El exlíder y exconcejal de ICV en Argentona, Àngel Puig, ha negado cualquier vínculo con el caso de abusos sexuales a menores revelado ayer martes, día 23, en el municipio de Maresme. Además, asegura que nunca ha mantenido una relación sentimental con el principal acusado, el monitor Miquel Nieto. Puig, que también fue arrestado por la Policía Nacional en el marco de la misma operación y quedó en libertad con cargos, ha sido acusado por la policía de ser partícipe de los abusos cometidos presuntamente por Nieto en la vivienda que ambos compartían, algo que él niega rotundamente. Todos estos hechos han causado gran conmoción en Argentona por la gravedad de los hechos y por la identidad de los acusados.
En declaraciones a Capgròs, Puig ha asegurado que nunca ha sido pareja de Nieto, quien fue número 2 de ICV en las elecciones municipales de Argentona de 2015 en una lista que lideraba el propio Puig. El exconcejal (lo ha sido hasta 2023 en el ayuntamiento de Argentona) sí ha reconocido que el monitor y docente vivía en su casa, y que fue allí donde la Policía Nacional lo detuvo. Pero Puig ha asegurado que Nieto residía allí solo porque "le alquilaba una habitación" y que ambos llevaban una vida "totalmente independiente y separada". "No he sido su pareja sentimental ni entonces ni nunca", ha enfatizado Puig, que se ha desmarcado totalmente de cualquier vínculo con el caso de abusos a menores.
Nieto y Puig en una imagen de campaña electoral de ICV del 2015, donde fueron número 2 y 1 respectivamente
Las acusaciones de la Policía Nacional
Según ha manifestado la Policía Nacional en un comunicado vinculado a la detención de Nieto, los agentes encargados del caso descubrieron que Puig, a quien identifican como la supuesta pareja del monitor, habría participado en las relaciones sexuales abusivas con menores. En concreto, la policía asegura que Puig habría "intentado estrechar lazos con estos (menores) para poder participar en dichas relaciones". Además, aseguran que en la vivienda donde teóricamente vivían los dos hombres "se organizaban fiestas con menores de manera que creaban el ambiente idóneo para ganarse su confianza con vistas a mantener relaciones engañosas, llegando a consolidar relaciones con estos menores de hasta dos años".
Nieto, por su parte, que había sido monitor de tiempo libre en Argentona y colaboraba con cinco escuelas del área metropolitana de Barcelona y en varios campamentos de verano con niños y adolescentes, tenía en su posesión imágenes con más de 70 menores diferentes, que los agentes le encontraron en el registro en la casa donde residía con Puig. Según la policía, Nieto se desplazaba a diferentes puntos del Estado y del extranjero para cometer los abusos. Se le atribuyen los delitos de corrupción de menores, pornografía infantil, agresión sexual y ‘grooming’.
"No participé en ninguna fiesta"
El exconcejal está pendiente de que el juez lo cite a declarar como investigado en la causa abierta por delitos de corrupción de menores, pornografía infantil, agresión sexual y ‘grooming’. Puig no entra a valorar en detalle las acusaciones hechas por la Policía Nacional ya que asegura que no tiene acceso a ellas y se ha "enterado de muchas de ellas a través de los medios de comunicación". En todo caso, señala que son "informaciones muy confusas y erróneas". Por ejemplo, asegura que él nunca participó en ninguna fiesta en su casa con Nieto y con menores. "Una vez, aprovechando que yo me iba fuera de fin de semana, me preguntó si podía invitar amigos a casa a hacer una fiesta, y le dije que sí; es la única vez que pudo haber habido una fiesta de este tipo, pero no lo sé, no estuve presente. El resto de veces, imposible; me habría enterado", asegura.
TV3 ha señalado que Puig acompañó a Nieto en un viaje a Murcia donde el monitor habría contactado con un menor de edad, y que, ya en la prisión, el acusado de abusos habría pedido al exconcejal que le enviara unas cartas, ya que estaría "enamorado" de él. Puig reconoce a Capgròs que el citado viaje se produjo, pero que en su caso se debió a una estancia en un balneario de la región para recuperarse de una dolencia que sufría.