La situación de alerta por sequía se podría extender en Cataluña si no llueve. Actualmente, está declarada la alerta en el ámbito del acuífero de Carme Capellades, en la zona del Anoia, situación que comporta restricciones en el uso del agua. El jefe de departamento de Gestión de Recursos Hídricos de la Agencia Catalana del Agua (ACA), Enrique Velasco, ha explicado a la ACN que si esta situación no cambia, la situación de alerta y las restricciones que la acompañan se podrían extender a otros puntos del territorio. Actualmente, los embalses de las cuencas internas están por debajo de la mitad de su capacidad y con un volumen disponible "similar" al del 2007, cuando tuvo lugar la gran sequía. Ante esto, ha pedido conciencia y ahorro.
La situación de alerta comporta limitaciones y restricciones a los diferentes usos de las redes de agua potable. En cuanto a los usos urbanos, hay limitaciones en el riego de jardines y zonas verdes, la prohibición de llenar fuentes ornamentales, la limpieza de calles y la limitación en el llenado de piscinas. Además, hay una limitación del consumo global de agua por abasto a un máximo de 250 litros por habitante y día. Además, el resto de usos tendrán que reducir sus consumos en función del tipo. Así, la reducción será de un 25 % en el riego agrícola, de un 10 % en los usos ganaderos, de un 5 % en los industriales, de un 30 % en los usos recreativos que impliquen riego y de un 5 % en cuanto a otros usos recreativos.
Actualmente hay 15 municipios afectados por esta medida, 14 de la comarca del Anoia y uno del Alt Penedès: Vilanova del Camí, Vallbona d'Anoia, la Torre de Claramunt, Santa Maria de Miralles, Santa Margarida de Montbui, la Pobla de Claramunt, Orpí, Òdena, la Llacuna, Jorba, Igualada, Carme, Capellades, Cabrera d'Anoia y Mediona.