La Torre Barceló ya tiene fecha. El que será el edificio más alto del Maresme ya ha iniciado los trabajos previos sobre el terreno y tiene una previsión de 26 meses de obras por adelantado. Esto sitúa el calendario de estreno del edificio y la remodelación de los entornos a finales de verano del 2024. Después de años de varios cambios de proyecto, ahora va de bono y el Ayuntamiento no escatima elogios por el que simbolizará el inmueble: "un hito de la ciudad que queremos ser".
Tenían ganas la promotora, el despacho de abogados y el gobierno municipal de presentar el proyecto no solo del edificio, también de sus entornos. Una obra importante, que quiere transformar un sector, el de la Ronda Barceló, que había quedado empantenegat después de la crisis del 2008. "La ciudad ha hecho una apuesta importante por el frente marítimo y faltaba el elemento de Barceló. Es una buena noticia que se invierta porque la ciudad que tenemos al cabo va ganando piezas y se va convirtiendo en realidad", asegura el alcalde David Boto. La regidora de urbanismo Núria Moreno ha elevado el elogio a la noticia del día a la categoría de "hito de la ciudad que queremos ser".
Junto con la urbanización de la zona y un nuevo paso subterráneo al otra banda de la vía del tren que "progresa adecuadamente", el consistorio celebra que la intervención presentada integra el edificio protegido de la Harinera y descoyunta toda la zona. "Ahora se ve la apuesta por la nueva actividad económica y una nueva zona residencial que responde al modelo de ciudad por el que apostamos", asegura Moreno.
Que el alquiler sea de calidad
Y todo esto quién lo paga, que preguntó Pla mirándose Nueva York. Stoneweg prevé una inversión de 21,37 millones para la torre de 26 plantas ii 16.300 metros cuadrados de techo residencial donde se podrán hacer un máximo de 192 viviendas libres en régimen de alquiler. Su representante Emma Bellosta ha explicado que la apuesta por Mataró se enmarca en "la elaboración de un portfoli de alquiler de calidad. A España hay una gran necesidad de producto de alquiler y el parque disponible está por debajo de la media europea y proc profesionalidad. Son propiedades antiguas y de poca calidad. Nosotros buscamos crear edificios de alta calidad y de alta sostenibilidad y eficiencia energética". Y en estas han sido quién han apostado por el proyecto de la Torre Barceló.
Un edificio verde, fragmentado e integrado
La Torre Barceló lo ha concebido y parido Alcalde y Rojo Arquitectura, un bufete de arquitectos prestigioso que por medio de Enric Alcalde ha explicado el detalle de toda la intervención y el futuro edificio. Como elementos importantes hay la apuesta por la sostenibilidad y el verde con la máxima calificación ambiental como objetivo, el diseño fragmentado que quiere evitar ser un bloque gordo, la apuesta por la cerámica como material de construcción o la integración del edificio con los entornos. "Tiene un volumen importante porque se integra con el en torno a manera que hemos contribuido no solo en el edificio sino a toda la ronda y el sector del frente de mar sabiendo que hacíamos el edificio más alto del Maresme, un hito por el skyline de la ciudad y la comarca". El arquitecto ha remitido en el edificio Parco Glorias de Barcelona, al distrito del 22@ como parangón del estilo y el color que tendrá la Torre Barceló y ha citado Josep Antoni Coderch como referente de la arquitectura disgregada que desprende el proyecto.
De los 26 meses de obras, durante los primeros doce los trabajos se concentrarán solo en la torre y un golpe se haya levantado ya los primeros pisos de esta, PUMSA empezará a intervenir en los entornos por 684.000 euros y se espera que las obras del edificio y la urbanización acaben plegadas.
Las características de la futura Torre Barceló
- Será una torre esglaonada, cada vez más pequeña y enretirada de primera línea a medida que crecen las 26 plantas.
- A las plantas bajas habrá tres locales comerciales de 2.500 metros cuadrados. Se apuesta porque sean de restauración.
- El edifiici apuesta por los servicios y espacios comunes de forma que los vecinos tendrán salas y espacios "para hacer comunidad".
- 192 viviendas, todos de alquiler, con predominio de las viviendas de 2 dormitorios y algunos de 3 dormitorios.
- Hay terrazas comunitarias en los dos primeros pisos para el goce comunitario. Todos los pisos tienen balcons exteriores.
- A la planta 3 habrá una piscina comunitaria que, por altura, tendrá vista directa sobre el mar quedando por encima de las vías del tren.
- Apuesta por el verde con entornos con mucha vegetación y espacios comunes, lugares para sentar o terrazas.
- Continuidad del verde "que parece que remonte el edificio" entre las palmeras del entorno y los elementos naturales de las plantas del edificio.
- Voluntad de crear entornos húmedos y frescos, con predominio de zona de sombras. Aprovechamiento del agua fluvial, sensación de isla de frescura y refugio climático.
- Los entornos serán también hotel de insectos y mariposas y se plantará planta autóctona catalana y del medio maresmenc.
- El 51 % del ámbito será permeable en la línea del aprovechamiento y la gestión hídrica y como seguridad
- Apuesta por la cerámica como material de construcción para la fachada. "Aguanta mucho mejor la temperatura", aseguran.
- Predominio exterior de varias tonalidades de colores entre marronosos y verdosos con sensación de relevo propio de la cerámica. Se intenta respetar el color de la fachada marítima de Mataró.
- El edificio estará conectado al sistema de TubVerd de Mataró. Aspira a calificación energética Green internacional.
- Tendrá aparcamiento de bicicletas propio y punto de recàrrega para vehículos eléctricos.