El ritmo de ocupaciones no para en Mataró. Después de las cifras de récord sufridas durante el año pasado, que llevaron el Ayuntamiento a tirar un grito de alerta y a reclamar apoyo a las administraciones, este 2022 no parece que el fenómeno decaiga en la ciudad, a pesar de que cada vez quedan menos pisos vacíos para ocupar.
Desde final del mes de enero y hasta medianos mes de abril se han producido más de 200 ocupaciones a Mataró, y la Policía Local ha parado 58. Esto implica una media todavía superior a la del año pasado, que fue de más de 40 al mes. Estas sueño datos explicitados por el alcalde, David Bote, al consejero de Interior, Joan Ignasi Elena, en una carta que le envió el 12 de abril pasado.
En la citada misiva, Bote recuerda al consejero que el fenómeno de las ocupaciones tiene una dimensión especial a Cataluña, que concentra la mayoría de casos de este hecho delictivo al Estado. "Por eso nos gustaría saber si el Departamento de Interior piensa abordar esta problemática que lejos de de apaciguarse parece incrementarse con el paso del tiempo".
Bote también recordó en esta carta, tal y cómo hizo en un mensaje a raíz de los disturbios a Rocafonda, que la Generalitat todavía no ha ofrecido un compromiso "concreto y creíble" sobre la incorporación de nuevos agentes para trabajar en el ámbito de la seguridad ciudadana. El alcalde reclama medidas concretas en este ámbito, con más Mossos para Mataró de cara a luchar contra las mafias que promueven las ocupaciones. "Es una problemática que nos preocupa muchísimo", señala Bote.