Edificio ocupado de la calle Cuba.

Por qué no echan de inmediato los ocupas del bloque de la calle de Cuba?

Un golpe consumada la ocupación no se los puede expulsar de un día por el otro; todo queda en manos judiciales y el único camino que tiene el Ayuntamiento de Mataró es intentar aplicar un protocolo municipal que intenta acelerar el proceso

La Policía Local de Mataró intervino ayer miércoles día 24, a requerimiento de los vecinos, en el bloque de viviendas de la calle de Cuba que ha sido ocupado esta semana. Los agentes constataron que la ocupación estaba consumada, y que los ocupas, según el testigo de los vecinos, hacía varios días que ya estaban instalados. Ante una situación tan flagrante, como es que no se echa los ocupas de inmediato? Pues, simplemente, porque no se puede. Una ocupación de una vivienda que no es primera o segunda residencia sólo se puede parar de inmediato si se pilla los ocupas 'in fraganti' intentando entrar al inmueble. Pero cuando ya se han instalado, el proceso queda en manos judiciales y es mucho más largo y complejo. El Ayuntamiento de Mataró, pero, se ha dotado de un protocolo que permite, en algunos casos, acelerarlo.

No se los pudo pillar in fraganti, la ocupación se había realizado hacía días

El caso de la calle de Cuba es bastante sintomático de las ocupaciones que se sufren en Mataró. Un edificio de seis viviendas, abandonado desde hace una década cuando las obras quedaron inacabadas y que actualmente pertenece a la SAREB (el 'banco malo'). Hace unos días varias personas accedieron y echaron paredes y tabiques, manipular suministras y cambiar cerraduras, de cara a rellogar-ne ilegalmente las viviendas. Los vecinos lo denunciaron a la Policía Local y los Mozos, pero cuando los agentes del cuerpo municipal intervinieron, ayer por la tarde, tan sólo pudieron constatar que la ocupación ya estaba consumada desde hacía días. En este caso no se los pescó en el momento que entraban al edificio, que es cuando se los puede parar (tal y cómo han hecho en numerosas ocasiones la Policía Local y Mozos, consiguiendo echar los ocupas y avisando los propietarios porque tomaran las medidas pertinentes).

Ante esto, la Policía Local se limitó a identificar algunos de los ocupantes del bloque, notificar la incidencia a la compañía eléctrica y abrir un expediente de la ocupación para hacer seguimiento del caso. A banda, se ha denunciado a dos de los ocupantes por tentativa de defraudación de luz cuando intentaban hacer un enganxament eléctrico. A partir de aquí, se abre un largo proceso para intentar desocupar la vivienda por vía judicial, la única posible. El propietario del inmueble tendrá que denunciar la ocupación y se abrirá un caso que acabará, presumiblemente, con una orden de desahucio, un proceso que suele durar muchos meses.

Una desocupación en Mataró, con la Policía Local

En casos como este, especialmente si se acaban convirtiendo en conflictivos para la convivencia vecinal, el Ayuntamiento intenta aplicar el llamado 'Protocolo Mataró'. Este protocolo, que ha funcionado con éxito en un total de 52 inmuebles, como lo de la calle Jaume I, moviliza los servicios de Salud, Bienestar, Vivienda y Mediación, y se basa al estudiar si la ocupación supone un riesgo para las personas por motivos de deficiencias estructurales, insalubridad o riesgos de habitabilidad. Si se demuestra que es así y que el riesgo no es subsanable, se abre una vía porque el juzgado acelere la desocupación. Pero estos extremos no son siempre aplicables.