Campeón de liga, Assolim CN Mataró, contra campeón de copa, Sant Andreu. Este mediodía se ha jugado en la piscina del Centre Natació Mataró uno de los mejores partidos de waterpolo que se puede ver a nivel estatal y también en todo el continente. El conjunto de la capital del Maresme, que ha tenido que rehacer la plantilla después de ver como se marchaban al Sabadell jugadoras importantes, casos de Aarts, Van de Krats o Keszthelyi, pero también, por ejemplo, Anni Espar, que ha vuelto al Mediterrani, ha perdido con el Sant Andreu de las cinco campeonas olímpicas.
Elena Ruiz ha hecho el primer gol del partido cuando ya se había jugado más de la mitad del primero cuarto (0-1). El Mataró ha aprovechado su cuarta superioridad para empatar. Morgan McDowall, máxima goleadora del último Mundial, ha fintado con frenesí hasta encontrar el agujero (1-1). Así se ha llegado al final del primer periodo. Máxima igualdad.
Ari Ruiz ha vuelto a adelantar al Sant Andreu en los primeros minutos del segundo cuarto. Queralt Antón, de solo 16 años, ha hecho el tercero (1-3) y, a partir de aquí, el intercambio de golpes ya perjudicaba al conjunto de casa. Maria Palacio ha contestado al gol de Martina Claveria (2-4) y a continuación Ari Ruiz ha empezado a abrir rendija (2-5). Así se ha llegado al descanso largo.
El CN Mataró no se ha encontrado cómodo en ningún momento. Sin fluidez ofensiva, y con Martina Terré sellando la portería del Sant Andreu, veía como pasaban los minutos del tercer cuarto sin poder acercarse en el marcador. En la otra punta de la piscina, en cambio, Ari Ruiz, con su tercer gol del día, y Gisel·la Farré, hacían la herida más grande (2-7). Ballart ha pedido tiempo muerto para parar la sangría. No ha habido más goles en el parcial. El Mataró, inoperante en ataque, no ha hecho ninguno durante este tercer cuarto.
Ya en el último, el Sant Andreu ha seguido controlando la situación y ha hecho el octavo. Martina Claveria se ha rebelado haciendo el tercero y el cuarto gol del Mataró, tres goles en total para la juvenil del equipo, pero ya era demasiado tarde. El conjunto visitante, cómodo y tranquilo con todavía cuatro goles de ventaja (4-8), ha gestionado la diferencia hasta la bocina y todavía la ha podido ampliar algo más con un gol de Marina Cordobés a dos segundos del final de esta Supercopa (5-10).