En balonmano los zurdos juegan por la derecha. La banda derecha del pabellón Teresa Maria Roca de Mataró no tendrá a partir de la temporada que viene el amo y señor que lo he recorrido durante la última década: Bernat Muñoz Balcells se retira a los 28 años. En una comida de final de temporada, los compañeros de equipo y la directiva quisieron obsequiarlo con un recuerdo.
Bernat Muñoz ha sido uno de los puntals del primer equipo del Juventud Balonmano Mataró desde que ya durante su último año de juvenil entró en dinámica del primer equipo, participando del último ascenso a Primera Nacional, la tercera división estatal dónde ha jugado desde entonces el equipo. Muñoz, un zurdo de gran físico y calidad, se ha consolidado a la banda derecha del ataque, alternando primero el extremo y después el lateral, jugando 12 de sus 18 años de trayectoria deportiva al primer equipo de la entidad amarillo-y-negro.
Germà de la también jugadora Ola Muñoz, no se puede entender la última década de presencia ininterrumpida del Juventud a Primera estatal sin la aportación de Muñoz. El zurdo, que había sido seleccionado en etapa formativa por la selección española -donde coincidiera con los dos actuales porteros internacionales Gonzalo Pérez de Vargas y Rodrigo Corrales- heredó hace cuatro años de Toni Busquets la capitanía del primer equipo mataroní.
La generación del 91
Bernat Muñoz forma parte de la que es una de las mejores generaciones de jugadores surgidos del plantel amarillo-y-negro. Siempre entre los primeros de Cataluña en categorías inferiores, la cosecha del 91 acabó coincidiendo al primer equipo durante años. Junto a Muñoz hasta el primer equipo han jugado Dani Aguilera, Bernat Bonamusa, Berenguer Chiva o Guillem Fàbregas. La del 91 se considera una de las mejores generaciones de la historia del club junto con la histórica del 82.