Bernat Muñoz trae años siendo uno de los máximos goleadores del Juventud Balonmano Mataró y una pieza clave en el engranaje del equipo. Ahora, con una plantilla donde los veteranos tienen 25 años, es también uno de los líderes indiscutibles. Unas molestias al hombro le han impedido en los últimos tiempos conseguir los registros anotadores que se le presuposaven, pero desde este 2017 se encuentra mucho más cómodo y con menos mal. Sólo hay que ver el partido con el Esplugues de sábado: 10 dianas vitales para ganar a un rival por la lucha por la permanencia.
"Estamos en una zona complicada y sabíamos que había que ganar en la Esplugues para dejarlo atrás y empezar con buen pie la segunda vuelta", explica el jugador amarillo y negro, que añade: "somos conscientes de nuestras capacidades, que si jugamos bien podemos ganar a todo el mundo... Pero si lo hacemos mal podemos perder con todos". Por Muñoz, la temporada no es fácil por muchos motivos: "tenemos probablemente la plantilla más joven de Primera Estatal y hemos sufrido dos cambios de entrenador, en septiembre y antes de vacaciones". Por eso, cree que figuras como su u otros veteranos tienen que aportar un plus: "Tenemos que dar un paso adelante para superar esta situaciói y ayudar a que los recién llegados, o al club o a la categoría, se adapten rápidamente".
Por él, una de las claves del rol que tiene que jugar, ahora todavía más decisivo después de la baja de Juàrez, es inculcar compromiso y ganas: "Hace años que compito en Mataró, los de casa tenemos que estar siempre al 100% para contagiar a los que vienen de fuera del proyecto que tenemos por adelantado".
Muñoz no tiene ninguna duda que el equipo se salvará. "Creo que podríamos estar mucho más arriba a la clasificación, y por eso trabajamos".