El Hapo Joventut Mataró ganó de manera contundente ante el OAR Gracia de Sabadell, que hasta el partido en la capital del Maresme era cuarto en la clasificación. Con este triunfo, las mataronenses se consolidan en la zona tranquila de la clasificación. Ahora mismo son octavas con quince puntos y diecisiete partidos jugados.
Los diez goles de diferencia al final del partido (33-23) indican la convicción que exhibió el conjunto local durante todo el duelo. Era la única manera de superar al OAR de Sabadell, uno de los rivales más complicados del campeonato. Las del Vallès, instaladas en lo alto de la clasificación, se vieron superadas por el Hapo desde los compases iniciales del partido. El primer parcial de 2 a 0 indicaba el camino. El OAR todavía no había marcado pasados cinco minutos de partido.
Durante la primera mitad el conjunto local fue controlando el marcador con pequeñas rentas que, al descanso, eran cuatro goles de diferencia (14-10). Después del paso por vestuarios, el Hapo rompió el partido. Cuando se habían jugado diez minutos de la reanudación, el Joventut ya mandaba de once (24-13). A partir de aquí, el equipo local controló la situación con ventajas cómodas para llegar al definitivo 33 a 23.
Ona Muñoz, que hizo 10 goles, fue la gran cañonera del partido. Maria Muñoz hizo 7, y Alisa Forné y Clara Poo marcaron 5 respectivamente. Esta vez el Joventut no necesitó que la segunda mejor goleadora de la liga, Poo, llegara al registro de dos dígitos. En cualquier caso, el Hapo la tiene a ella y a Ona Muñoz, que se encuentran entre las cinco que más goles marcan en el campeonato. Una garantía competitiva.