El restaurante de Mataró Lasal del Varador ha sido reconocido por Ecovidrio como uno de los establecimientos hosteleros más sostenibles de Cataluña en el marco de la quinta edición del #MovimientoBanderasVerdes. Este premio destaca la apuesta del local por la sostenibilidad y su contribución a la protección del medio ambiente, consolidándose como un referente en el sector de la restauración sostenible.
Lasal del Varador, situado en primera línea de mar en Mataró, ha sido galardonado por diversas iniciativas que integran la sostenibilidad en su funcionamiento diario. Entre estas medidas, destaca el uso de placas solares, que reduce la dependencia de energías no renovables, y la implementación de principios de arquitectura bioclimática que permite evitar el uso de aire acondicionado, promoviendo un confort natural en el interior del restaurante.
Además, el restaurante se compromete con un uso racional del agua, una gestión clave para minimizar el impacto ecológico. Lasal del Varador también es conocido por su cocina ecológica, basada en productos de kilómetro cero y de temporada, lo que no solo garantiza la frescura de los ingredientes, sino que también apoya a los productores locales y reduce el impacto ambiental asociado al transporte de alimentos.
Otro aspecto que ha contribuido a este reconocimiento es su participación en proyectos para la protección de las dunas costeras, una iniciativa que refuerza su compromiso con la preservación del litoral catalán.
Este premio forma parte del proyecto #MovimientoBanderasVerdes de Ecovidrio, que tiene como objetivo destacar y reconocer el compromiso de los establecimientos hosteleros y los municipios con el reciclaje de vidrio y el desarrollo sostenible. En esta edición, han participado más de 15.400 hosteleros de 141 municipios, entre los cuales Lasal del Varador ha brillado como un ejemplo de sostenibilidad.
El reconocimiento otorgado a Lasal del Varador pone en valor los esfuerzos de la restauración local para avanzar hacia un modelo más respetuoso con el medio ambiente, demostrando que la sostenibilidad y la gastronomía pueden ir de la mano.