Este jueves 12 de septiembre comienza una nueva temporada del ciclo Músiques Tranquil·les en Mataró, una propuesta de la Casa de la Música que se ha convertido en un clásico en la escena cultural de la ciudad. Este proyecto ofrece a los mataronenses y visitantes una experiencia musical única: escuchar conciertos de proximidad en un entorno acogedor, mientras se disfruta de una cena en el teatro de la Alianza, que por una noche se transforma en un club íntimo y cálido.
Con la voluntad de reinventarse, los organizadores de Músiques Tranquil·les han apostado por un cambio de rumbo en esta nueva edición. Históricamente dirigido a un público de entre 35 y 60 años, ahora el ciclo busca llegar a un abanico más amplio de personas. La dirección artística pone énfasis en abrirse a nuevos colectivos, con especial atención a los jóvenes, y en hacer la propuesta más atractiva para todos. "Queremos que más gente descubra este espacio tan especial, que se cree una comunidad musical que vaya más allá del espectáculo en sí", comentan.
El ciclo también se plantea como una herramienta para dinamizar la escena musical de la ciudad. Su apuesta es clara: programar músicos de calidad que tal vez no tengan la gran notoriedad de otros nombres, pero que ofrecen conciertos en vivo con un alto nivel artístico. Así, "Músiques Tranquil·les" quiere convertirse en un trampolín para músicos emergentes o artistas con mucho talento, pero que hasta ahora no han tenido la oportunidad de brillar en circuitos más grandes.
Cada segunda semana del mes, el Casal l'Aliança se convertirá en un punto de encuentro donde los asistentes, habituales o nuevos, podrán disfrutar de música de todos los estilos y procedencias. En un ambiente íntimo y familiar, los conciertos comenzarán a las 9 de la noche, pero las puertas se abrirán una hora antes, creando un espacio para que los espectadores tengan tiempo de conversar, relajarse y conectar con otras personas antes de la actuación. La dirección destaca que se quiere fomentar este ambiente cercano y de fidelización: "Queremos que la gente no solo venga por el concierto, sino también por la experiencia y la comunidad. Es una manera de romper con la rutina y crear lazos".
Oriol Madres y Talal Fayad protagonizarán uno de los conciertos de este otoño
Una oferta para descubrir el talento del país
Una oferta para descubrir el talento del país Una de las singularidades de "Músiques Tranquil·les" es su apuesta por la diversidad de estilos. Lejos de centrarse en un género concreto, la dirección artística ha programado propuestas muy variadas que abarcan diferentes tendencias musicales, tanto del ámbito mataronense y del Maresme como de otras regiones. Esto permite que cada concierto sea una experiencia única, haciendo que el público no sepa exactamente qué esperar, pero confiando en la calidad de la oferta que se les propone. La organización apuesta por nombres que quizás no sean muy conocidos por el gran público, pero con gran talento y una trayectoria consolidada. Es decir, una cita ideal para descubrir y sorprenderse con nuevas propuestas.
Además, el ciclo no solo busca innovar en la música, sino también en la experiencia que ofrece a los asistentes. El hecho de que se pueda cenar antes del concierto, gracias a la colaboración del bar del teatro, aporta un plus de confort y convierte el acto en una velada completa donde la cultura, la gastronomía y el buen ambiente se fusionan.
Inicio con Matriu: poesía y ritmos experimentales
El primer concierto de la temporada, este jueves 12, lo protagonizará Matriu, un proyecto formado por Albert Guanyabens y Andreu Teteji, dos músicos con una amplia trayectoria. Matriu nace de la necesidad de explorar nuevas vías creativas y expresar inquietudes personales a través de la música. El grupo busca escapar de los patrones tradicionales y explorar la esencia más íntima y creativa de la música. Con composiciones que van desde la nostalgia hasta la crudeza, Matriu presenta una poesía musicalizada que combina ritmos complejos con cortes más íntimos y oníricos, ofreciendo una experiencia que viaja entre la reflexión y la fuerza.
Una de las particularidades del proyecto es su flexibilidad escénica: Matriu puede actuar en formato de dúo acústico, pero también puede ampliarse hasta una banda de cinco músicos, adaptándose a las necesidades y dimensiones de cada concierto. Su música es, en palabras de los miembros del grupo, una reflexión sobre la matriz de la vida, el elemento creador que nos hace avanzar, caminar y experimentar.
Por el momento, se conoce la programación de este otoño, que se completa con los siguientes conciertos:
- Oriol Marès & Talal Fayad Quartet - 10 de octubre. Un dúo de diferentes orígenes culturales, formado por un clarinetista de jazz latino y compositor de Barcelona, y un intérprete de oud y compositor de Siria. Ambos buscan encontrar un terreno artístico común a través de sus propios arreglos y composiciones, donde cada uno invita al otro a un espacio musical fuera de su zona de confort.
- Ignasi Zamora Blues Reunion - 14 de noviembre. Un proyecto nuevo y fresco que parte de la experiencia de todos sus miembros tocando con otras bandas de blues y rock. Presentarán temas propios con los que saldrá el primer disco de la banda, temas que en directo se mezclan con revisiones de grandes clásicos llevados al Blues, al Second Line y pasando por el Bluegrass.
- Alosa - 12 de diciembre. Giulietta Vidal (voz) e Irene Romo (violonchelo) presentarán sus interpretaciones únicas y su capacidad de fusionar tradición y modernidad. Canciones plenas y redondas solo con dos integrantes, que envuelven al público con la voz hipnótica de Vidal y el enérgico violonchelo de Romo, además de pequeños instrumentos de percusión tradicionales