El Tofu es un alimento vegetal rico en proteínas y con un alto contenido en minerales, fibra, así como bajo en calorías. Originario de oriente, es cada vez más frecuente encontrarlo en las cocinas de todo el mundo. El tofu se obtiene de la fermentación de la soja, por lo cual es un alimento elaborado que no se encuentra por si mismo y que presenta muchas variedades en función del nivel de agua que se utiliza en su preparación. Dependiendo de esto, podemos distinguir el Tofu Firme (Firm), el Tofu Silken o el Regular Tofu, etc.
Normalmente, el tofu es un alimento neutro, sin sabor, aunque pueden encontrarse hoy en día muchas variedades condimentadas. El más habitual y emprat es lo Tofu Firm y el que mejor se integra a cualquier plato. Porque quede muy cocinado, el primero que tendremos que tener en cuenta es que hay que escurrirlo bien para sacar el exceso de líquido. Para lo cual, podemos posarlo dentro de una escorredora y estrecharlo suavemente porque vaya expulsando el agua. Algunas personas además, lo dejan durante una hora envuelto en papel absorbente o un paño de cocina bien neto, bajo algún objeto pesado hasta que queda el más seco posible.
Aunque el tofu puede cocinarse de muchas maneras, las más usuales son a la plancha, asado o al horno. Al ser un alimento sin sabor, absorbe fácilmente el sabor otros alimentos, condimentos o esencias con las qué se cocina. Para asarlo o hacerlo a la plancha, hay que hacerlo bien por todos los lados, hasta que quede un poco crujiente a las esquinas. Puede acompañarse servido de arroz, verduras o quinoa, o integrarse en ensaladas y en otros guisos.
Este alimento lo toman mucho los vegans y los vegetarianos que suelen tomarlo en sustitución de la carne, pero también es muy indicado para aquellos que quieren adelgazarse o simplemente llevar una dieta saludable. Tienen que abstenerse de comerlo o al menos limitar mucho su consumo las personas que tienen cálculos renales, debido a su alto contenido en oxalato.
img 20221110100939