El calor extremo que se ha vivido este verano ha provocado que los calibres de manzanas y peras que se cosechan estos días se hayan reducido, no solo a las comarcas de Lleida, sino a todo Cataluña, el resto de España y Europa. El director general de Afrucat, Manel Simon asegura que la situación es generalizada pero que la fruta de este año es de muy buena calidad y "más dulce". Por eso pide al consumidor que se fije más en el sabor de las manzanas y las peras que no en la estética. Desde Afrucat también piden al mercado de la distribución que ajusten las exigencias a la realidad de la campaña. "Hasta ahora se exigían entre 60 y 65 centímetros a las peras conference. Este año tendrán que ser de entre 55 y 60, sin perder calidad gustativa", apunta.
El motivo por el cual este año manzanas y peras son más pequeñas es porque en situaciones de estrés hídrico por falta de agua o cuando las temperaturas son extremas, ya sea por el frío o el calor, el árbol frena su crecimiento y prioriza la supervivencia por ante el crecimiento del fruto. Es por eso que el calor extremo de este verano ha provocado que los árboles hagan frutos más pequeños a todo Europa. Otro ejemplo sueño las manzanas gala. No se ha avanzado la maduración y no serán tan rojizas por fuera.
Calidad máxima
"Ha sido una situación generalizada", asegura Simon. Aún así, el director general de Afrucat confía que la calidad será máxima y que la dulzura será más alta que otros años porque al haber menos fruta y ser más pequeña, esta concentrará más cantidad de brics.
Por Simon, la situación de este año ha sido puntual, a pesar de que reconoce que "está para ver" qué pasará los próximos años. "El cambio climático es aquí y las condiciones meteorológicas son cada vez más extremas", alerta.