La consejería de Empresa plantea una desescalada por fases con varios niveles con colores similares al de un semáforo que permitiría reabrir pronto las terrazas al 50% para ofrecer comidas entre las 13 horas y las 16 horas. Así lo apunta un documento avanzado por 'El Nacional' y al cual ha tenido acceso el ACN. El plan, inspirado en lo otros países europeos como el de Irlanda y pensado para suavizar paulatinamente las actuales restricciones anti-Covid, sitúa el momento actual de la pandemia en un 'nivel 4' de color rojo, y prevé los diversos escenarios para la restauración, el comercio, las grandes superficies, los mercadillos o los servicios de contacto como la estética, reduciendo las restricciones a medida que la situación epidemiológica mejora. La propuesta de empresa es que este viernes se pase a fase 3b, de color naranja fuerte.
La propuesta de la consejería que dirige Ramon Tremosa ha sido trabajada con los sectores económicos, y es sobre la mesa del Procicat, según han indicado fuentes de la consejería. Pero el Gremio de Restauración de Barcelona ha negado que haya "acordado o trabajado conjuntamente" con la Generalitat la propuesta de reabrir las terrazas al 50% para hacer comidas. "La única propuesta que cuenta con el aval del Gremio es el llamado 'pacto del Majestic': interiores al 50% con distancia entre mesas, terrazas al 100%, horario de apertura hasta las 23 horas y recomendación de ponerse la mascareta entre plato y plato", ha dicho el Gremio en un comunicado.
Según el Gremio, abrir entre las 13 horas y las 16 horas es "una propuesta de fireta, completamente insuficiente para la actual situación de emergencia y de hundimiento de la economía". "Instamos la Generalitat a levantar la orden de cierre y permitir la reanudación de la actividad", añaden los restauradores.
El plan de desescalada de empresa
En concreto, se plantean cinco niveles de desescalada: del nivel 4, equivalente a la situación actual, hasta un nivel 1, de color verde -con un nivel tres por duplicado (3a y un 3b) para permitir cierta flexibilización de la actividad incluso en escenarios complejos epidemiológicamente. Es precisamente el nivel 3b el que el equipo de Tremosa propone que se active a partir de ahora. En este escenario, además de las comidas en terrazas para la restauración, se permitiría la reapertura de los centros comerciales, pero limitando el aforo al 30% dentro de las tiendas y al 20% en las zonas comunes. En el caso de los servicios como los de estética, podrían reabrir pero sólo con cita previa, y estableciendo un sistema de un solo cliente por cada prestamista de servicio. Al comercio generalista, en esta fase se mantendría la reducción actual del aforo al 30%, así como en los mercadillos.
Al nivel 3a, el comercio, las grandes superficies y los mercadillos ya podrían abrir al 50% del aforo, mientras que la restauración tendría que trabajar con un 30% del aforo en el interior y un 50% a las terrazas. La barra seguiría cerrada y habría un horario de cierre límite –previsiblemente marcado por el toque de queda. La estética y otros sectores de contacto personal cercano podrían abrir al 50%.
En el siguiente nivel de desescalada, el segundo, marcado de color amarillo, el comercio ya no tendría restricciones de aforo, pero los centros comerciales sí: tendrían que garantizar un máximo del 75% de la gente permitida en el interior. Los mercadillos también tendrían un 75% del aforo, igual que los centros de estética, mientras que bares y restaurantes podrían abrir al 50% en el interior y al 75% a las terrazas, manteniendo todavía las barras suspensas y un horario máximo de apertura. Al último nivel de desescalada, el nivel 1, de color verde, todas las empresas y sectores podrían abrir sin restricciones de aforo pero siempre cumpliendo con las medidas de seguridad personal como la higiene, el uso de mascaretes o el mantenimiento de distancias de seguridad.