El cocinero Ferran Adrià ha alertado que la mayoría de los establecimientos de hostelería del Estado no llega a los cinco años de vida por la mala gestión empresarial. Adrià lo ha explicado en la inauguración de un curso intensivo sobre gestión de hostelería que organiza CaixaBank a Girona. El cocinero ha remarcado la importancia de calcular bien los márgenes de beneficio que puede tener un bar o un restaurante y la importancia de fijar los precios en función de los costes. "Que un local esté pleno no quiere decir que sea rentable", ha remarcado Adrià. Además, el cocinero ha posado de manifiesto la importancia de tener un buen equipo de sala, puesto que es uno de los principales elementos en que se fijan los clientes.
Los márgenes de beneficio son la diferencia entre el coste de los productos y servicios que un restaurante ofrece y el precio al cual se venden a los clientes. Para asegurarse que el negocio sea rentable, los propietarios de restaurantes tienen que ser conscientes de todos los costes asociados a su establecimiento, incluyendo el coste de los alimentos, el alquiler, los sueldos de los empleados y los impuestos.
Una forma de aumentar los márgenes de beneficio es reducir los costes sin comprometer la calidad. Esto puede incluir la negociación con proveedores para obtener precios más bajos u optar por ingredientes de temporada que sean más económicos. Por otro lado, el derroche de alimentos tiene un impacto negativo en los márgenes de beneficio. Implementar medidas para reducir el derroche, como por ejemplo el uso de un sistema de inventario eficiente, puede ayudar a mantener los márgenes de beneficio saludables.
La gestión eficiente de los márgenes de beneficio, la fijación de precios competitivos y la construcción de un buen equipo de trabajo son aspectos clave para garantizar el éxito en la industria de la restauración. Las palabras de Ferran Adrià nos recuerdan que la mala gestión empresarial puede llevar al fracaso incluso a los restaurantes con los mejores menús y chefs talentosos. Por lo tanto, es esencial que los propietarios de restaurantes tomen seriamente la gestión de sus negocios y estén dispuestos a aprender y adaptarse para prosperar en este sector competitivo.