Canet Rock trabaja desde hace meses en la edición de este 2021, prevista por el 3 de julio, y se mantiene firme en la voluntad de celebrar el festival, adaptando el espacio y los protocolos en las restricciones vigente en julio en la lucha contra la Covid-19. El de Canet es el festival más importante del Maresme y tiene agotadas las entradas.
Los responsables de los grandes festivales en Cataluña han empezado a trabajar en un plan para presentarlo a las autoridades sanitarias. Utilizar testos rápidos, incrementar la superficie de los festivales para ampliar la distanciación social, el uso de mascarilla y el hecho que se hagan al aire libre son algunos de los ases que esgrimirá el sector para hacer posible las ediciones de este verano. Los principales escollos será ver si los asistentes pueden estar derechos o se mantiene la obligación de preassignar un asiento y si podrán llegar los jefes de cartel internacionales.
El caso del Canet Rock
Uno de los factores que pueden beneficiar el Canet Rock es el hecho que el cartel está formado por músicos de los Países Catalanes y no dependen de la movilidad de artistas a nivel internacional. "Evidentemente, lo imaginamos y estamos luchando para hacerlo desde ya mismo ", explica su directora, Gemma Recoder en declaraciones a la ACN. En este sentido, el certamen garantiza que pondrán a disposición de las autoridades todas las herramientas para garantizar la seguridad sanitaria del festival al público.
Además del registro de participantes habitual en los festivales, la directora del Canet Rock se abre a incorporar el uso de testos rápidos, mascarillas, aplicaciones para el móvil y, incluso, la ampliación del espacio en el Plan de en Sala -que podría acoger hasta 50.000 personas-, pero manteniendo el aforo de cada año para garantizar una mayor distancia de seguridad.
"Pondremos las herramientas que hagan falta, tenemos tiempos, ganas y experiencia al montar auténticas ciudades en descampados donde no hay nada. El único que es hace daño es la incertidumbre", añade Recoder. El único aspecto que no voz modificable es el hecho que los asistentes tengan que estar sentados, porque modificaría el formato del festival.