Un conflicto eterno, una historia enquistada, una herida abierta con más de 75 años de historia. El Café Nuevo y su patio, emblema del patrimonio perdido de los Cooperadores, que los enfrentaba en el Centro Católico en un litigio por el cual parecía no haber solución. Pero al final, ha llegado, gracias a la buena voluntad de las dos partes, dispuestas a ceder y también a perdonarse agravios históricos, y a la intermediación del Ayuntamiento.
El consistorio pasará a ser el propietario del Café Nuevo, mediante expropiación y el pago de 650.000 euros en 10 años, después de llegar a un acuerdo con las partes implicadas: Aurèli Masafrets de la COOP, Unión de Cooperadores, Patronato de la Sagrada Familia y Centro Católico. El Pleno de abril, celebrado ayer jueves, dio luz verde en el acuerdo, que se firmará en los propes días. Queda para definir qué plan de usos se dará a este equipamiento, que tiene que ser rehabilitado. Todo el mundo espera, en todo caso, que recupere el papel de café cultural que ejerció en sus mejores años.
El edificio del Café Nuevo y su Patio estaban gestionados por la Unión de Cooperadores y eran la pieza más emblemática de su patrimonio. Su propietario legal, pero, es el Patronato de la Sagrada Familia, vinculado en el Centro Católico, después de un complicado y polémico proceso posterior a la Guerra Civil, cuando los cooperadores perdieron todo su patrimonio. El Patronato, pero nunca ha hecho uso, ni tampoco el Centro Católico como usufructuario, y en 80 los cooperadores van "okupar" el espacio, reivindicándolo como propio. Aureli Masafrets, al frente del Centro de Orientación Psicopedagógica (COPP) convirtió el edificio en un núcleo cultural activo. Ya hace años, pero, que ha dejado de serlo, y el edificio sufre una degradación importante.
Meses de negociaciones
La semilla del actual acuerdo se plantó en 2012, cuando se firmó el convenio entre Ayuntamiento, Centro Católico y Cooperadores para desencallar el litigio. Han hecho falta meses, pero, para acabar de cerrar el acuerdo sobre el futuro del edificio. Este, junto con el patio ya reurbanizado e inaugurado el año pasado, pasará a ser equipamiento público. El valor de la expropiación que el Ayuntamiento tendrá que liquidar con el Patronato Sagrada Familia es de 624.000 euros en 10 anualidades.
Imagen de archivo del edificio