El problema es la multireincidència. Mataró ya hace tiempo que prioriza un endurecimiento de la ley contra la multireincidència (acumulación de delitos) cómo la herramienta legislativa estatal necesaria para remitir el aumento de los datos. Esta modificación llegó finalmente el pasado julio. Por lo tanto se tendría que notar, si es eficiente, en el actual periodo: la segunda mitad de 2022.
A partir de ahora, cualquier persona que haya cometido dos o más robos leves de objetos que sumen más de 400 euros se podrá enfrentar a penas de hasta 18 meses de presoó. El objetivo final de la iniciativa es enmendar el "desproporcionado salto punitivo" que hasta ahora se daba entre los castigos previstos para los robos de menos de 400 euros y las penas a multireincidents. Es decir, según la ley penal previa a esta reforma, un carterista podía pasar de tener que pagar una multa de hasta tres meses para robar algo con valor inferior a 400 euros a enfrentarse a penas de prisión de hasta tres años por reincidente, siempre que el delito no fuera leve. Pero no había ninguna medida punitiva contemplada entre estos dos extremos.
Pasa a ser agravante
Y es aquí precisamente donde se introduce esta medida. Se modifica el artículo 234 del Código Penal porque la reincidencia se considere cómo un agravante en aquellos casos de hurto leve (o inferiores a 400 euros) en los cuales el valor de todo el robado con anterioridad sí que sume más de 400 euros. Se aumenta el castigo, pero sin llegar a la pena de prisión del tipo agravado que se contempla para los casos de multireincidència.
Así, una persona que, por ejemplo, haya sido condenada al menos tres veces más para robar objetos con poco valor, pero que, en total, sumen más de 400 euros, se enfrentará a penas de prisión de seis a 18 meses, y no a una simple multa cómo ocurría hasta ahora para los hurtos leves. "De este modo, se aconsegueix dar a los casos de multireincidència una respuesta penal más dissuasiva y ajustada a la gravedad de la conducta, sin incurrir en un incremento desproporcionado de la pena", defiende el texto.