Las promociones inmobiliarias repunten en Mataró. Cualquier peatón se da cuenta paseando por la ciudad: hay grúas en solares que traían años parados, los anuncios de pisos nuevos empiezan a llenar la vía pública y florecen las nuevas inmobiliarias. Los datos que dispone el Ayuntamiento confirman esta tendencia, a pesar de que de cabeza de las maneras son cifras comparables a los años previos a la crisis económica, cuando el sector del totxo llegó a su punto culminante antes de derrumbarse. Pero este notorio repunte en el mercado inmobiliario entra en contradicción con la situación del parque de viviendas mataroní. Mientras afloran las nuevas promociones, en la ciudad llangueixen unas 2.500 viviendas vacíos, la mayoría de los cuales en manso de propietarios privados, que no los ponen a la venta ni al alquiler.
"Hay una reactivación de la actividad constructiva a la ciudad, el número de comunicaciones y licencias se ha doblado en los dos últimos años" resume la regidora de Urbanismo, Núria Calpe. Durante el año 2015 el Ayuntamiento recibió 261 solicitudes de licencias de obras, 108 más que al 2013, y un total de 1426 comunicaciones abres, casi el doble que dos años antes. No se trata tan sólo de obra nueva, sino que también incluye rehabilitaciones y reformas, pero pone datos en la percepción de los vecinos que las grúas han vuelto a la ciudad. La tendencia este 2016 seguirá en aumento, a tenor del que se apunta desde el Ayuntamiento, puesto que hay promociones nuevas que se pueden concretar en las próximas semanas.
En todo la ciudad
Entre las promociones más destacadas que avanzan a buen ritmo, seguramente la que simboliza más este auge es la torre de 13 plantas que está construyendo Sorigué al sector de la Ringlera, con un total de 60 viviendas. Pero no es la única. Núñez y Navarro hace meses que te desees en la calle Pizarro. A una escalera más pequeña también destaca la promoción en la calle Sant Josep con Muralla de Sant Llorenç, en un solar que sumó muchos años acumulando polvo a pesar de su emplazamiento tan céntrico y goloso. Procercasa ha acabado la construcción de 16 viviendas a la calle Colom, e impulsa una nueva promoción a la ronda Alfons XII. También hay una promoción pendiente en un lugar muy céntrico de la ciudad, la Bajada de las Escaletes. Y en el futuro se tienen que desarrollar dos sectores, el de Cereza Industrial, donde se prevén hasta 600 pisos; e Iveco-Pegaso, donde Solvia anunció su intención de empezar a construir pronto y donde se están ultimando los escombros de las naves en desuso que ocupaban la zona. Pero no todo son pisos: a Can Serra, a tocar del Hospital de Mataró, EA3 Grupo y Bourgeois Prime construyen 12 casas adosadas de alto standing, con 295m2 y zona comunitaria con piscina.
De cara al futuro, destacan dos proyectos que todavía están pendientes de definir: una promoción inmobiliaria y comercial al Cine Iluro, cerrado desde el año 2001 y floreciéndose desde entonces. Y una importante cadena de supermercados, que ya tiene presencia a la ciudad, se ha interesado al abrir un gran local cerca de benzinera de la carretera de Mata.
Pisos nuevos y pisos vacíos
Pero esta reactivación del sector inmobiliario no se debe de a que en Mataró carezcan pisos, todo el contrario: actualmente se calcula que hay unos 2.500 de vacíos. El problema es que en su mayoría son pisos que no ni en alquiler ni a la venta. Unos 500 están en manso de entidades bancarias, pero el resto son de propiedad privada, muchos de los cuales de "grandes tenedores" que poseen un extenso número de pisos fuera del mercado. El Ayuntamiento trabaja porque estas viviendas en desuso se puedan recuperar, sobre todo para poder destinarlos a alquiler social para aquellas familias que pierdan su vivienda en procesos de desahucios y ejecuciones hipotecarias.
El consistorio se concentra en estos particulares porque considera que con las entidades bancarias ya se está trabajando en la buena línea. "Ellos mismos ya han establecido que cuando un cliente no puede pagar la hipoteca ya le ofrecen un piso con un alquiler social, porque tenerlos vacíos y en stock los supone un problema", explica Calpe. La cuestión, pero, es como conseguir que los propietarios privados cedan. En este sentido, la regidora de Servicios Sociales, Isabel Martínez, dijo hace unas semanas que "No perseguiremos la familia que tiene un piso parado para el hijo, sino a quien especula y no le da a las viviendas su finalidad, que es que viva alguien".
Posibles sanciones
Desde la concejalía de Urbanismo, Núria Calpe apuntó que la gestión directa de estos alquileres por parte del Ayuntamiento tendría que dar garantías a estos grandes tenedores que poner en alquiler sus pisos no los supondría ningún dolor de cabeza a nivel de seguridad y de burocracia, a pesar de que al ser alquileres sociales los ingresos serían menores que en el mercado libre. La cuestión es si el consistorio se puede dotar de mecanismos para castigar aquellos casos que se nieguen en redondo a ceder los pisos para seguir especulando con ellos. El Ayuntamiento trabaja en una Ordenanza de viviendas vacíos que podría establecer un régimen punitivo. Calpe apuntó, pero, que no la desarrollarán hasta que no haya una ley marco catalana que establezca en qué casos se podría llegar a sancionar. "Hablamos de meternos como administración en la vida de un particular y en el derecho a la propiedad privada", apunta Calpe, para explicar como de delicada es esta cuestión.
-