Uno de los grandes temas del año 2016 fue las continúas desavenencias entre Ayuntamiento y consejería de Salud, por un lado, y la dirección del Consorcio Sanitario del Maresme y los trabajadores del Hospital, por la otra. Los problemas se multiplican y durante el año pasado no se encontró solución. Las inversiones pendientes en el Hospital no se han resuelto, a pesar de que el consejero Toni Comín prometiera una inyección de dinero para el 2018 que desde el territorio niegan que sea extraordinaria, sino que era una partida ya prevista.
Las inversiones pendientes en el Hospital y el futuro del ámbito sociosanitario se tienen que resolver
Mientras tanto, el futuro del sociosanitario sigue al aire. La Generalitat ha frenado el traslado, se mantiene en el antiguo hospital de Santo Jaume, pero esta no puede ser su sede por siempre jamás más, puesto que no cumple con las condiciones exigibles. Cuál es el plan de Salud para la atención sociosanitaria en Mataró y en el Maresme central¿ Todavía nadie lo sabe. Los consistorios de la zona, con el de Mataró al frente, no se han cansado de hacer presión, y han hecho evidentes numerosas topadas, como cuando el alcalde David Boto dejó plantado Comín en su visita a la ciudad. Mientras tanto, los sindicatos han puesto de manifiesto en numerosas ocasiones que la situación al Hospital de Mataró es grave, que la maquinaria ha envejecido y que falta personal, algo que la dirección del Consorcio niega, pero sin acercar posturas con los representantes de los trabajadores. Es un desgavell, y este 2017 hay que solucionarlo.