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Caen las ventas de vehículos eléctricos y el sector enciende las alarmas

Reclaman ayudas directas y más puntos de carga para hacer atractivo un tipo de movilidad que desde la UE se ha señalado como clave en el futuro.

La industria de la movilidad sostenible lanza un grito de alerta ante la caída en las ventas de vehículos electrificados, que incluyen tanto los eléctricos cómo los híbridos endollables. Durante el mes pasado, se matricularon en todo el Estado poco más de 8.000 turismos de este tipo, un descenso del 4 % respecto a julio de 2023. Esta tendencia negativa deja las cifras del año en unas 64.000 unidades vendidas, sin ningún progreso respecto al mismo periodo del año anterior.

Esta situación preocupa especialmente las empresas del sector, que advierten que la carencia de apoyo decidido por parte de las administraciones posa en riesgo tanto las inversiones cómo los puestos de trabajo. Actualmente, los vehículos electrificados representan solo el 10 % del mercado total, una cuota ligeramente inferior a la del año pasado, hecho que hace alejarse de los objetivos marcados por el gobierno español, que prevé llegar a los 5 millones de vehículos eléctricos para el 2030.

La asociación AEMES Smart, que agrupa más de 180 empresas del sector de la movilidad sostenible a España, incluyendo una fuerte presencia catalana, destaca la necesidad de políticas públicas más contundentes para impulsar la demanda y las infraestructuras. Su directora, Nieves Olea, subraya que hay muchos puestos de trabajo en juego, especialmente en empresas que han apostado por la electrificación y otras tecnologías sostenibles. "Sin infraestructura, no hay demanda ni industria", advierte, haciendo referencia a los puntos de recàrrega para vehículos eléctricos como elemento clave para el éxito del sector.

Actualmente, España cuenta con cerca de 30.000 puntos de recàrrega públicos, una cifra que se queda muy corta en comparación con otros países, cómo la Xina, que recientemente ha superado los 10 millones de puntos de recàrrega, de los cuales 3 millones son públicos.

Una de las principales empresas del sector, Wallbox, también apunta a la necesidad de mejorar la infraestructura de recàrrega para activar la demanda. Iván Tallón, responsable de Wallbox para España y Portugal, destaca que uno de los principales problemas es la excesiva lentitud en los trámites administrativos para instalar nuevos puntos de recàrrega, que pueden tardar entre 12 y 18 meses a legalizarse.

Además, la industria reclama más ayudas directas para la compra de vehículos eléctricos, puesto que consideran que la actual lentitud en la respuesta de la administración dificulta la venta de estos vehículos. Aún así, Wallbox remarca que la ratio de puntos de recàrrega por vehículo a España es bastante buena, con un punto por cada ocho vehículos, debido al reducido número de vehículos electrificados en circulación.

Finalmente, desde el sector se quiere desmentir el mito de la poca autonomía de los vehículos eléctricos. Wallbox, por ejemplo, ofrece cargadores con una potencia de hasta 220 kilovatios, que permiten recorrer hasta 200 kilómetros con solo 10 minutos de carga.