El teletrabajo covid –la modalidad de trabajo en remoto "excepcional y menos garantista"– continuará todo y el levantamiento de l'estado de alarma, según explican juristas y sindicalistas a la ACN. En las últimas semanas se han detectado consultes d'emprendidas y trabajadores sobre si el fin de la medida excepcional tendrá consecuencias. La realidad es que la incidencia real será muy poca. "El teletrabajo covid irá más vinculado al tiempo que llevamos mascareta que al estado de alarma", ejemplifica el abogado Pere Vidal. En un año, los índices de teletrabajo han subido exponencialmente, sobre todo entre los empleados públicos, cosa que "beneficia trabajadores y administración" pero puede posar en riesgo el derecho a la atención a los más vulnerables, alertan los expertos.
Los expertos consultados por el ACN coinciden a decir que el teletrabajo-covid es una medida de prevención del virus que se alargará tanto cómo dure la situación epidemiológica excepcional. Esta modalidad singular de trabajo a distancia "sigue perfectamente amparada" mientras haya medidas de carácter limitativo "sean estatales o autonómicas", indica el profesor de derecho administrativo de la Universitat de Barcelona, Joan Mauri. De hecho, el Procicat continúa determinando en las resoluciones de restricciones para combatir la covid que siempre que no sea imposible se tiene que favorecer el teletrabajo. "Pasa el mismo que con la mascareta, que es una medida de prevención que no se dejará de aplicar, sino que durará hasta que las autoridades sanitarias consideren que no hay pandemia", ejemplifica, en la misma línea, el abogado de Agusta Abogados Pere Vidal.
El Real decreto 28/2020 establecía dos modalidades de trabajo en remoto, una de habitual con "un marco muy rígido" y otra "menos garantista" y vinculada a la emergencia sanitaria, según Mauri. "El teletrabajo covid es teletrabajo con menos garantías. La única obligación por la parte empresarial es el suministro de medios", añade el profesor de derecho administrativo.
Sindicatos y asesores legales han recibido preguntas de trabajadores y empresarios sobre si podrán continuar teletreballant cómo hasta ahora, por la barrera psicológica que comporta el fin de un régimen legal excepcional. "Es un tema que preocupa, tenemos consultas de todo tipo, de gente que tiene ganas de volver a la oficina porque el teletrabajo se le está haciendo mucho llevar por la falta de contacto social y todo el contrario, gente que no querría devolver al trabajo presencial porque tiene miedo a la situación de posible contagio", explica la secretaria de Acción Sindical de CCOO, Cristina Torre.
Los gastos
Con el levantamiento del estado de alarma las empresas podrán continuar teniendo la plantilla haciendo trabajo en remoto sin acuerdos individuales que recojan aspectos cómo el de la compensación de los gastos. La normativa deja la puerta abierta a la compensación de gastos a través de acuerdos entre sindicatos y empresas pero se han logrado muy pocos porque la negociación colectiva está parada, recuerda el abogado Pere Vidal. Los trabajadores que lo quieran pueden acudir a los juzgados para reclamar los recibos de luz o de Internet que han pagado de más pero el jurista avisa que es "complicado" poder acreditar el incremento de gastos en relación con las que tenían cuando iban a trabajar cada día en la oficina.
Uno de los pocos acuerdos que se ha logrado es lo del convenio de las cajas de ahorro y el de la banca, que pactó una compensación de 55 euros al mes para hacer trabajo a distancia. La secretaria de Acción Sindical de CCOO asegura que la gran mayoría de acuerdos para compensar los gastos establecerán compensaciones de aproximadamente esta cantidad. "Si los acuerdos son muy superiores, las empresas no querrán que nadie teletreballi", dice Torre.
El teletrabajo "ha caído"
Antes de la pandemia solo el 4 % de ocupados trabajaban en remoto. El confinamiento domiciliario y las restricciones a la movilidad dispararon hasta el 30 % estos índices. Un golpe pasado la primera sacudida, estas cifras han ido bajando y la última versión de la Encuesta de Población Activa dibuja un escenario donde el teletrabajo se ejerce en el 11 % de los casos. "Hace muchos meses que el teletrabajo ha caído. No tanta gente cómo nos pensamos está teletreballant", asegura la secretaria de Acción Sindical de CCOO. El aumento exponencial del trabajo a distancia causó situaciones en las cuales los empleados no tenían los medios ni el espacio suficiente para trabajar. Torre añade que los problemas que se han evidenciado con el teletrabajo "derivan de la situación de precariedad de los trabajadores", como por ejemplo las dificultades para cumplir la jornada de trabajo y de cobrar las horas extra.
Todo y la proliferación de situaciones precarias de teletrabajo, Inspección prácticamente no ha recibido denuncias de estas prácticas, según indican fuentes del Departamento de Trabajo. Los casos en que ha actuado la policía laboral catalana han sido porque no ha habido un acuerdo y la empresa ha intentado imponer unilateralmente en el trabajo a distancia. La consejería prevé que durante la segunda mitad del año será cuando se pondrá a prueba la efectividad del Real decreto y pueden aumentar las denuncias a medida que la situación sanitaria se vaya normalizando.
El teletrabajo a la administración y los más vulnerables
Gran parte del aumento del trabajo a distancia se debe de a los empleados del sector público. Mauri alerta que "en la administración pública el marco es mucho más flexible" que la del resto de empresas. Cada administración está definiendo su propio concepto de teletrabajo. Por ejemplo, el Ministerio de Política Territorial y Función Pública acordó recientemente las bases de un acuerdo a la administración estatal, que prevé que los empleados puedan hacer trabajo desde casa 3 días a la semana.
La Generalitat fue de las primeras administraciones a adoptar una normativa justo antes del estallido de la pandemia y de momento todavía no lo ha adaptado a la ley básica estatal. Una de las principales diferencias entre las dos normativas es que la catalana no incluía la obligatoriedad de la administración de proporcionar los equipos necesarios para trabajar y el estatal sí.
Mauri cree que el teletrabajo ha sido positivo por administraciones y empleados pero se muestra preocupado por los efectos sobre la población con más dificultades. El profesor de derecho administrativo a la UB señala que el teletrabajo a las administraciones puede estar perjudicando los ciudadanos más vulnerables que no tienen medios telemáticos. "El contacto con las administraciones públicas es un derecho", dice el experto en derecho administrativo, que avisa que el sistema "tiene vacíos que afectan las clases más débiles de la población". En este sentido, anima el Síndico de Agravios a seguir los pasos de sus homólogos del País Vasco y Valenciano y a elaborar un informe para saber si la ciudadanía tiene los canales suficientes para mantener el contacto con la administración.
Previsión de futuro
A la hora de hacer una previsión sobre cómo quedará el mundo del trabajo un golpe levantado el estado de alarma, los expertos prevén una "pequeña regresión" a las oficinas en algunas plantillas que teletreballen al 100 % a corto plazo.La profesora de IESE Business School y experta en dirección de personas, Mireia Las Heras prevé que ahora se comience un periodo de transición hasta normalizar que los trabajadores puedan hacer entre un 20 y un 60 % de la jornada laboral en remoto. "El trabajo en remoto va mucho más allá del trabajo desde casa, que es una de las opciones, pero otra son las oficinas satélite o los coworkings", ha explicado esta experta.
En este sentido, De las Heras cree que la ley de teletrabajo "tendrá que ir evolucionando" para adaptarse a las necesidades de las compañías, puesto que el redactado actual "tiene sentido por las grandes empresas" pero no tanto por las pequeñas.