La Nave Dance Studio es un caso de éxito muy remarcable en tiempo de pandemia . La escuela de danza, especializada en cultura hip hop, abrió puertas el mes de septiembre pasado en Mataró, y ha afrontado su primer curso en un año mucho llevar para todo el mundo en general, y para las actividades extraescolares y de ocio en particular, llenas de restricciones y protocolos anti-Covid. "Ha sido una aventura muy heavy, no las teníamos todas, pero el balance es muy satisfactorio, hemos superado todas las expectativas", explica Silvia Arteta, la directora del centro ubicado al barrio del Escorxador. En su curso inaugural han superado los 170 alumnos, una cifra que no esperaban lograr hasta el tercero o cuarto año. Un alumnado muy variado, de los 2 a los 60 años, procedentes de Mataró, el Maresme y también Barcelona y Baix Llobregat.
La Nave Dance Studio se presenta cómo "mucho más que una escuela de danza". Cuenta con un equipo de nuevo profesores que imparten clases de hip hop, danza contemporánea, acrobacia, psicomotricidad, breakdance o sexy style, entre otros. Em la nave situada en la calle Herrera se han beneficiado del 'boom' que vive la danza. "Incluso tenemos gente mayor que siempre había querido bailar y que ahora ha perdido el miedo y se ha desinhibido", destacan desde La Nave.
También destacan las competiciones de diferentes estilos de danza que se disputan a nivel nacional, donde participan grupos de alumnos de la escuela. "Va a parte de las clases, sirven para marcarnos objetivos y trabajar la comunidad", afirma Arteta.
El TecnoCampus, aseguran desde la Nave, ha sido clave en la puesta en marcha de la escuela de danza. "Suerte de ellos, si no fuera por su apoyo y asesoramiento en todos los ámbitos, todo esto no habría sido posible", constatan.