El miércoles fue San Antonio Abad y, por lo tanto, no hace falta ser un pozo de ciencia para adivinar que este fin de semana es su réplica o continuación. El patrón de los animales es un santo con renombre, devoción y ritual, y aunque en Mataró este año se ha perdido la expresión más genuina y popular, como la celebración de los Tres Tombs, lo que se mantiene, lo que queda, es uno de los postres más peculiares del año: la herradura, la rosquilla propia de San Antonio.
La herradura de San Antonio es la rosquilla típica de la celebración, una rosquilla con forma de herradura de caballo. De la misma manera que del interior de la rosca de Reyes sale la figurita de uno de Sus Majestades, del interior de la herradura sale una figurita de un animal. La herradura no es exclusiva de Mataró, sino común en diferentes zonas donde la celebración de los Tres Tombs y de San Antonio de los burros tenía más predicamento. En Mataró, normalmente, más que con el 17 de enero, la herradura iba de la mano con la celebración de los Tres Tombs. El fin de semana que se celebraban, las pastelerías hacían herraduras. Veías animales al mediodía y de postre de la comida te comías algo dulce.
Con la suspensión de los Tres Tombs anunciada por el Ayuntamiento este año, los pasteleros se han esforzado por mantener la tradición.
En la mayoría de los casos, así, han vuelto al fin de semana posterior al Santo.
De esta manera, este fin de semana se puede comprar rosquilla en diferentes establecimientos de la capital del Maresme.
Las pastelerías recomiendan siempre encargar la herradura para asegurarse los postres.
Que la tradición no se pierda.
El mismo día 17, los encargos de herradura fueron anecdóticos, pero para el fin de semana la gran mayoría de pastelerías se han apuntado por su cuenta a mantener la tradición dulce de San Antonio. Es el caso, por ejemplo, de la pastelería Sacher. Su maestro pastelero Antoni Pons explica que "sin Tres Tombs hemos decidido hacerlo el fin de semana y lo he publicado en Instagram, pero no sabemos cómo irá, a ver si habrá trabajo". Pons aboga por una mayor coordinación entre el sector en la capital del Maresme ya que "si no lo potenciamos entre los pasteleros, en dos años se perderá. Este año nos ha pillado por sorpresa, pero creo que deberíamos coordinarnos para mantener la tradición entre todos". Comparte una opinión similar Claudi Uñó que reflexiona que "es triste que las tradiciones tan antiguas se pierdan".
Siempre mejor encargar.
La gran mayoría de pastelerías mataroninas preguntadas por Capgròs mantendrán en alto la bandera de la tradición y hacen herraduras para San Antonio. Eso sí, recomiendan encargar porque con la incertidumbre de saber la respuesta de la gente sin Tres Tombs, no estirarán más el brazo que la manga... de pastelero.
En Casa Graupera, por ejemplo, no han dudado en anunciar en su propio escaparate y en las redes que tendrán herradura. Sacher y Uñó, de los que ya se ha hablado, también mantienen oferta. En Garriga hacen dos tipos de herradura: de hojaldre y de mazapán con brioche. Uno de los pasteles más buscados siempre es el de la Granja Caralt, donde prácticamente solo atenderán encargos. En la pastelería Avinguda hacen una sola herradura, para entre 4 y 6 personas, de mazapán. La Vienesa también hará herraduras pequeñas y grandes solo si hay encargo previo. Rosaga igual.
Por otro lado, hay otras pastelerías que o no las hacían ya en los últimos años o este 2024 no secundarán la tradición. Si se coordinara más, de cara al próximo año, podrían planteárselo. Al fin y al cabo, la herradura es el segundo pastel más genuino del año después del de Reyes. Mataró, por San Antonio, se puede abrazar bien fuerte.