Casa Fermín, uno de los bares-restaurantes más populares del Centro de Mataró, cierra sus puertas. La necesaria recuperación física pendiente de él, de Fermín, ha adelantado los planes de jubilación de la pareja que lo ha regentado todos estos años. Fermín y Montse, Montse y Fermín... El 2 de marzo será el último día de una etapa de éxitos y, sobre todo, de mucho cariño por parte de la clientela. De los bocadillos generosos para desayunar y del menú casero asequible para almorzar en la Plaza Gran.
- Casa Fermín cierra esta semana y reabrirá la última semana, del martes 27 de febrero al sábado 2 de marzo.
- Se acaban 21 años de Casa Fermín, que dejarán paso a un nuevo local, con nuevo nombre y nueva gerencia al frente.
- La voluntad de ambas partes es que haya continuidad en el tipo de establecimiento y comida.
"La hostelería es un oficio duro y exigente y yo ya no puedo más, físicamente", explica Fermín González. Ciertamente, desde hace unos meses le cuesta caminar y ahora se tendrá que operar. Tenía pensado alargar unos meses más la historia de Casa Fermín, pero finalmente anticipa su jubilación, junto a su esposa Montse Blanch. Fermín y Montse, Montse y Fermín son la pareja que explica el éxito que ha tenido este Bar-Restaurante. Recuerdan que "aquí hemos trabajado mucho y nos hemos podido ganar bien la vida, ha habido y hay clientela porque la gente que viene siempre repite". Montse explica que espera que "los platos más conocidos como los macarrones y todo el guiso puedan seguir haciéndolos" sus sucesores. Y recuerdan cómo cuando abrieron el bar-restaurante en toda la Plaza Gran no había ningún otro establecimiento. El Barralet, en Magí de Vilallonga, y para de contar.
Casa Fermín es todo un clásico, abierto impertérritamente de ocho de la mañana a cuatro de la tarde (hasta la pandemia también de tardes y noches como la del fin de semana) que tiene una de las terrazas más agradables del Centro. En fechas señaladas, además, no paraba de trabajar. Son ejemplo el Viernes Santo, cuando buena parte de los cofrades mataronins cargaban pilas antes de salir en la Procesión General o la mañana del 27 de julio, con el desayuno especial de Les Santes.
Fermín y Montse bajan la persiana contentos de la mucha gente a la que han hecho feliz cada día que han abierto durante más de dos décadas. Un restaurante de ir y repetir.
Un restaurante de ir y repetir
Seguramente, los mejores macarrones de Mataró
Casa Fermín es un bar-restaurante popular, asequible, sin aspavientos. Un bar-restaurante de toda la vida. Manteles de papel, pan del bueno y aceitunas mientras esperas el plato. Una cocina pequeña de donde salen los platos con gran calidad y rapidez, un pequeño milagro de Montse. Un negocio familiar, de parroquia fiel, a menudo con los mismos rostros y caras según el día y la hora. Sus bocadillos generosos, sobre todo de plancha y aderezados con un toque característico de salsa especiada, quedarán a partir de ahora en el recuerdo de los paladares que los han probado.