El Esberla es una cooperativa de Vilassar de Mar con 9 socias y 7 trabajadoras
Esberlar es un verbo precioso, que significa romper algo por su parte más débil. L'Esberla es, desde hace una década, una cooperativa maresmenca que acompaña y ayuda a esberlar entidades, empresas, colectivos o administraciones. Lo que hacen es buscar la parte débil o no suficiente consciente de las maneras de funcionar e incidir para cambiar: rompiendo, está claro. Desde Vilassar de Mar afuera, l'Esberla se toma el décimo cumpleaños cómo una buen momento para entrar más marchas, para llegar además colectivos, entidades y empresas. Para transformar todavía más processosos y funcionamientos en clave feminista y mucho más que feminista. Porque el abordaje que hacen y que les es propio va mucho más allá de las etiquetas que, hoy en día, a veces quedan decoloradas.
Andrea Cobo es una de las socias de la Esberla, una cooperativa de envergadura con 9 socias y 7 trabajadoras. Explica la función de la empresa asegurando que "acompañamos procesos a personas y colectivos para transofmrar-las, no solo en clave de género y feminismo, ecofeminisem economía social y solidaria, democracia organitzacional… miramos de hacerlo de manera muy vivencial, no a base de formación o datos sino a través de grupos, todo direccionat". L' Esberla no predica en solitario en el desierto y de hecho hay otras cooperativas similares en otras comarcas con las cuales está iniciando un proceso por enxarxar-se. "Se trata de tener más fuerza y que las perspectivas que nosotros hagamos coger cómo la de género acaben siendo una política pública más y no una lucha de entidades más o menos pequeñas", explica Cobo.
Esberla ofrece sus servicios a todo tipos de entidades, colectivos o empresas. Con la legislación obligando a emprendidas capitalistas de determinada dimensión a hacer planes de igualdad, la Esberla a veces encuentra reticencias en algunos de sus procesos de acompañamiento. "Hay un tema de género, nosotros somos mujeres yendo a empresas a menudo muy masculinitzades y pueden salir comentarios o miradas de personas que se piensan que están 'trabajadas' y después realmente no lo están", explican. El Esberla acumula verbos, en su hacer con quien las contrata: asesoran, forman, facilitan grupos, incorporan, restauran… la clave es incorporar una nueva mirada muy necesaria y que a lo largo de estos 10 años se ha ido posando sobre la tabla y más que haría falta que lo hiciera.
Celebraron con una fiesta popular los 10 años y siguen determinadas a ir tirando abrir los ojos, el cabo y el cerebro a organizaciones y empresas. "Tan de bono llegamos a muchos más procesos, todas las organizaciones necesitan trabajarse en ámbitos cómo las curas", explica Cobo. Hay Esberla por 10 y bastantes años más, aquí en el Maresme.
¿Qué aporta el Esberla a las emprendidas/entidades con quienes trabaja?
- La perspectiva interseccional.
Para entender cómo las múltiples discriminaciones, la desigualdad social y los abusos de poder interactúan entre sí en las relaciones entre personas y grupos. - El Trabajo de Procesos
Para facilitar el crecimiento y la transformación en el ámbito personal y colectivo desde una perspectiva multinivel. - El Trabajo que Reconnecta
Para permitir la libre expresión al volante de la crisis ecológica y social que estamos viviendo y acompañar la empoderament de las personas y grupos en la transición ecosocial. - La perspectiva feminista y la ética de la cura
Para posar la vida en el centro de las organizaciones y comunidades educativas. - Las técnicas de facilitación participativas y vivenciales
Para permitir el empoderament y la presa de conciencia de las personas y de los grupos sobre las opresiones, dinámicas y relaciones que conviven. - La mirada restaurativa
Para aportar un enfoque comunitario y de corresponsabilitat a la hora de reparar el daño en situaciones de conflicto.