El salón de los novios vuelve a abrir las puertas

La undécima edición del Salón Boda abre hoy sus puertas al Espacio Ferial del Nuevo Parque Central. La cita, todo un clásico en el calendario de ferias de la ciudad, permanecerá abierta hasta el domingo 15 de febrero. El horario será de seis a 2/4 de 10 del anochecer el viernes y de las once de la mañana hasta 2/4 de 10 del anochecer el sábado y el domingo.

“Intentamos hacer un salón equilibrado y tener un crecimiento equilibrado. Que sea un espacio muy acogedor y que pueda resolver el enlace a las parejas que lo visiten" comenta el secretario general de la Unión de Tenderos de Mataró, Josep Filbà. Unos 65 expositores ocuparán los stands de la carpa instalada por la ocasión, que será objeto de un ligero cambio de posición en relación al año pasado y ahora estará situada a la parcela de arena del Nuevo Parque, equidistando de la Plaza Granollers y de la Avenida del Corregiment.

El Salón Boda no es una feria multisectorial ni monosectorial, sino que Filbà la describe como “una feria especializada en el mundo del casamiento, donde existen varios sectores, como el equipamiento del hogar, la hostelería, la confección, etc.”. En este sentido, la feria va mucho más allá de los servicios necesarios por el día de la unión y engloba una oferta direccionada « al montaje de un hogar".

Las parejas jóvenes a punto de casarse forman el grueso de visitantes de la feria. A estos hay que sumar los familiares que los acompañan y profesionales de varios sectores. Los futuros novios tienen una ocasión inmillorable por, en una sola visita, organizar todos los aspectos relacionados con su boda, puesto que en tres días se concentra gran parte de la oferta relacionada con los enlaces de la comarca. “Teniendo en cuenta que los visitantes tienen que entrar con ticket, la mayoría de la gente queentra es porque le interesa. Tienen la comodidad de poder elegir entre una gran oferta” comenta Filbà.

Los visitantes, unos 15.000 la edición pasada, provienen de todos los puntos de la comarca. Salón Boda ha sido, desde sus inicios, una muestra marcadamente comarcal, puesto que es la única que secelebra de estas características.

Desde la primera edición, Salón Boda cuenta con el apoyo del Ayuntamiento, a través del IMPEM. Filbà describe esta relación como “muy satisfactoria. Es un grande ventatge contar con el espacio ferial, el consumo energético, etc. De este modo podemos ofrecer unos precios competitivos a los expositores”.

Desfiles nupciales
Uno de los grandes alicients de este event serán, sin duda, los desfiles nupciales donde los espectadores podràn hacerse una idea de las novedades de la nueva temporada en cuanto a vestidos de novio y novia. Los pases tendrán lugar el sábado 14 a 2/4 de siete de la tarde y el domingo 15 a 2/4 de una del mediodía y a 2/4 de siete de la tarde y serán organizados por empresas especializadas.

Entre las novedades, la Unión de Tenderos estrena este año un sistema de climatización por el Salón, puesto que cómo apunta Filbà, la feria se celebra durante la semana más fría del año. Esta mejora en la comodidad se inscribe en la filosofía de la Unión para mejorar poco a poco las condiciones de la muestra. Cómo dice Filbà “no buscamos efectismos, dessitgem que sea un Salón práctico y atractivo. Este año pasear por la feria será mucho más agradable”. En esta línea hay que remarcar que, por primera vez, los visitantes del Salón podràn aparcar sus coches en dos pàrkings cercanos: los situados en la Plaza Granollers y a la Avenida del Corregiment. Cuando a los expositores destaca una empresa de alquiler de coches de lujo que, según Filbà, “no sólo se utilizan el día de la boda, sino que también hay quién se marcha de viaje de boda con él”. Cada vez está más de moda utilizar estos costosos vehículos en lugar de limusinas o carruajes para celebrar este día tan importante en la vida de cualquiera.

El Salón Boda ya es un event tradicional en la ciudad, puesto que trae más de una década concentrando a clientes y expositores del sector. En cuanto a su futuro, el secretario general apunta que “mientrashaya parejas que se casen, Salón Boda tiene todo el futuro asegurado”. La única pega que encuentra Filbà en la celebración del acontecimiento es “la carencia de no poder contar con un espacio ferial establo. Así podríamos ofrecer unos servicios más confortables a todo el mundo. No es práctico tener que montar y desmontar una carpa cada vez que se quiera organizar una feria”.