Mataró apuesta estratégicamente por las curas y transformará el Antiguo Hospital

'PECT de Mataró-Maresme: ecosistema de innovación para las ciudades cuidadoras' puede parecer un de aquellos nombres hinchados que solo los políticos entienden, fuera del alcance comprensivo de la gente normal y corriente. Siempre se puede hacer el análisis, casi cómo se hacía a bachillerato: se trata de un proyecto con mitad de financiación proveniente de fondos europeos, estratégico, en que administraciones e instituciones en colaboración pública y privada, acecharán porque a Mataró y la comarca se desarrollen políticas pioneras en atención a la gente mayor y los discapacitados.

El proyecto, presentado con gran trascendencia, está liderado por el Ayuntamiento pero se trabajará conjuntamente con el Consorcio Sanitario del Maresme, TecnoCampus Mataró-Maresme, Centro Tecnológico Eurecat, Fundación Hospital y Fundación Maresme y quiere ser un vivero de nuevos productos, modelo y políticas en este ámbito del que se beba por todas partes. "Tenemos que ser una referencia nacional e internacional", dijo el gerente del Consorcio Sanitario del Maresme, Ramon Cunillera, al acto de presentación.

El antiguo Hospital, un espacio de innovación con 400 años de historia

Cómo se concreta todo esto? Básicamente convirtiendo el Hospital de Santo Jaume y Santa Magdalena en un tipo de laboratorio dónde de la colaboración entre instituciones públicas y privadas salgan las grandes soluciones y apuestas porque la ciudad sea conocida como referente, como pionera en este ámbito. Se tiene que llenar de contenido la idea en linde de 'Mataró: ciudad cuidadora'. No es una apuesta baladí. Se trata de una de las cuatro apuestas estratégicas que ha hecho la ciudad para transformar su economía y la primera, además, que recibe (que gana, más muy dicho) una subvención directa de la mitad del coste a través de fondos europeos gestionados por la Generalitat.

El Hospital de Santo Jaume y Santa Magdalena, con sus 400 años de dedicación al ámbito sanitario, es la joya de la corona

Los números totales de la operación dan fe de la envergadura de la misma: el presupuesto total es de 4.613.000 euros: la mitad de los cuales los aporta este fondo que se ha ganado con una nota de 7,2 sobre 10 cuando se convocaron las ayudas. La aportación del Ayuntamiento será de 1.888.000 euros que irán básicamente en la reconversión del antiguo Hospital en el espacio propio de este ecosistema. Hay presupuesto, hay proyecto y también hay cuques: hay un plazo de 18 meses porque la mitad de la obra sea una realidad. En el Ayuntamiento le tocará entrar marchas rápidamente.

El Antiguo Hospital combinará usos como sede del proyecto y sociosanitario mientras la Generalitat no concrete el nuevo centro a tocar el Hospital, a Cereza

El Hospital de Santo Jaume y Santa Magdalena, con sus 400 años de dedicación al ámbito sanitario, es la joya de la corona. Mutará de los actuales usos como centro sociosanitario del Consorcio Sanitario del Maresme a un nuevo espacio de dinamización del ecosistema. Un tipo de Tecnocampus de la asistencia a la dependencia, podría llegar a ser. En que se convertirá? En un innolab, un espacio de innovación social y diagnóstico físico, otro de atención al envejecimiento de personas con discapacitado o la suyo otros socios del proyecto con un CareLab (laboratorio de curas) donde se podrá innovar, testar y desarrollar productos, tecnologías y apuestas en este ámbito.

De Santo Jaume tendrán que salir, pues, las nuevas soluciones para responder a una tendencia que parece impepinable: el 2040 uno de cada tres mataronins será mayor de 65 años. Otra duda que surgió a la presentación: qué pasará con el sociosanitario del Hospital que ahora hay al equipamiento de la calle homónima? Hasta que no se construya el nuevo centro sociosanitario a tocar del Hospital de Mataró (se depende de la Generalitat que active el proyecto) el Hospital de Santo Jaume y Santa Magdalena tendrá espacio para mantener los dos usos: formar parte del nuevo proyecto y mantener pacientes sociosanitarios.

Qué tendrá que salir del nuevo equipamiento?

A pesar de que pueda parecer un puñado de buenas intenciones, el cierto es que alrededor del proyecto de este ecosistema de innovación ya hay los primeros deberes, con la aportación de cada uno de los socios clara porque salgan las concreciones: inteligencia artificial, sensores y robótica en habitados o aplicaciones móviles personalizadas son algunas de las soluciones que tienen que salir de este espacio y de la colaboración. También una cuadragésima de puestos de trabajo. "Estamos muy contentos porque esta es realmente una iniciativa transformadora que forma parte de la nueva estrategia para dibujar un nuevo futuro por Mataró: buscamos una ciudad justa y próspera, pionera en las nuevas economías, que avanza en las oportunidades en beneficio de la comunidad", dijo el Alcalde David Boto.

Las partes de cada socio

Más allá que la de martes fuera la presentación de un proyecto que se tiene que ir concretando (de las obras a las políticas y acciones) cada uno de los socios de este plan esbozó su aportación. Seguro que se sentirá a hablar pero los rasgos irán por aquí: el Consorcio Sanitario del Maresme apostará por la detección precoz de la fragilidad y aportará su conocimiento reconocido en disfàgia, el Tecnocapus estudiará los beneficios del deporte en la calidad de vida, Eurecat desarrollará la vigilancia tecnológica en aspectos cómo el sueño o la desnutrición, la Fundación Hospital se encargará de la sensorització de viviendas para colectivos vulnerables o la Fundación Maresme aplicará un proyecto piloto de seguimiento del envejecimiento en personas con discapacitado. Son solo ejemplos: todos estos ingredientes se tendrán que mezclar, cocinar y combinar. Y que del todo salgan soluciones reales para los mataronins dependientes de pasado mañana.