Rocafonda será el primer punto con cámaras de videovigilància policial en Mataró

El Ayuntamiento de Mataró instalará este 2021 las primeras cámaras de videovigilància en la vía pública –al margen de las que controlan el perímetro de edificios municipales– y se ubicarán en el parque de Rocafonda. El proyecto ya está adjudicado y sólo está pendiente de ejecutar, por el que la regidora de Seguridad Pública, Anna Villareal, asegura que "tendrían que estar" en marcha este año. La videovigilància llega a la ciudad con ocho años de retraso respecto al que preveía el Plano Local de Seguridad del año 2013 que ya apuntaba a la necesidad de incorporar esta tecnología a los puntos negros de la ciudad. Además de Rocafonda, el Ayuntamiento también ha proyectado la instalación de cámaras al polígono industrial y de ocio nocturn del Plan de en Boet.

El nuevo Plan de Seguridad Local de Mataró en el que trabaja el Ayuntamiento de Mataró recoge, una vez más, la necesidad de desplegar la videovigilància en las calles y parece que este mismo año llegarán las primeras concreciones. El parque de Rocafonda será la primera ubicación donde se instalarán cámaras.

El barrio ya era un objetivo el 2013, cuando se habló por primera vez de instalar este tipo de cámaras en Mataró, y lo volvió a ser entre los años 2018 y 2019 cuando varios incidentes pusieron en alerta los vecinos, el Ayuntamiento y Policía Local. El proyecto de las nuevas cámaras ya se licitó, se ha adjudicado y ahora sólo hace falta que se ejecute.

El Polígono Plano de en Boet y el Centro, los siguientes

En paralelo, el consistorio trabaja en nuevas ubicaciones en el polígono del Plan de en Boet y también quiere aprovechar esta segunda licitación para llevar al centro de la ciudad lse cámaras de lectura de matrículas para controlar el acceso del tránsito rodado a las áreas de prioridad para peatones, como el eje de la Riera y las calles de su entorno. La regidora de Seguridad Pública de Mataró, Anna Villareal, ha explicado en rueda de prensa que el proyecto más "avanzado" es el de Rocafonda, mientras que el ritmo de implementación de las otras dos ubicaciones es más lento: "Se tiene que hacer todavía el proyecto técnico y, por lo tanto, este año no estarían instaladas".

Villareal apunta también a otras "líneas" de trabajo en materia de seguridad para adaptar el servicio a nuevas demandas de la sociedad, como la contratación de una aplicación móvil de seguridad, la redacción de una nueva ordenanza de civismo o el despliegue de equipos de intermediación comunitaria.