Uno de los elementos diferenciales de la Torre Barceló, el polémico rascacielos de 26 plantas que se está construyendo al frente marítimo de Mataró , era que sus 192 viviendas serían todos de alquiler. Algo que, en teoría, tenía que servir para dar respuesta a la carencia de oferta en este ámbito. Pero finalmente no será así: todas las viviendas serán de venta..
Este sorpresivo anuncio se ha dado a conocer este viernes, día 24, durante una visita en la torre -que todavía está en construcción- de la mano de sus arquitectos, del despacho Batlle i Roig, donde han asistido autoridades cómo el alcalde de Mataró, David Bote, y periodistas. No se han dado detalles sobre el motivo del cambio en la comercialización del inmueble, una decisión tomada por Stoneweg, la multinacional immobiliaria que ha promovido el edificio. Las obras, iniciadas este 2024, van a buen ritmo y ya están entrando en el último tramo. Los promotores del edificio esperan que los primeros propietarios ya puedan entrar a vivir a inicios del año 2025, y de hecho la comercialización de los pisos empezará en breve.
Juan Galbis, responsable de activos de Stoneweg, ha definido el proyecto como "muy relevante", puesto que siempre "ha tenido repercusión y ha generado interés". Una repercusión a menudo en forma de críticas, puesto que buena parte de la ciudadanía ha expresado, a través de redes sociales y canales similares como por ejemplo la sección La voz que importa de Capgros.com, su escepticismo o directamente rechazo a la presencia de un edificio tan alto y que destaque tanto en el skyline mataroní.
Galbis, pero, ha asegurado que "desde el principio hemos trabajado con consenso y de manera equilibrada" para garantizar la ensambladura del rascacielos a la trama urbana mataronina. "Muchas decisiones se han tomado en este sentido, para buscar la integración, desde el primer minuto hemos buscado el equilibrio", ha defendido el portavoz de Stoneweg.
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