Un cuarto de siglo recuperando patrimonio fílmic

Encarnació Soler es Doctora en Historia del Arte y ha hecho de maestra toda la vida en diferentes escuelas e institutos de Mataró. De forma paralela, en 1992 empezó a recuperar patrimonio fílmic local y comarcal para depositarlo adecuadamente a la Filmoteca. "En la universidad nos hablaron de las películas antiguas y del peligro que tenía que perderlas y entonces empecé una tarea personal de ir a diferentes lugares y archivos a preguntar si tenían films antiguos", recuerda. Soler conoció a Joan Ciruela y el valor del cine amateur, un hecho que le dio el impulso para empezar: "Estas películas no se podían perder, son reflejos de nuestra manera de ser, de vivir y de trabajar". El año 1996 fundó la asociación catalana 'Cine Rescate', de la cual es presidenta, con el objetivo de unir fuerzas con otros voluntarios que también recuperaban patrimonio cinematográfico. Un cuarto de siglo después, Soler todavía continúa. Desde el principio, su tarea dio buenos resultados y ha podido recuperar miles de películas de la historia local y comarcal.

Cuál es la importancia de recuperar el patrimonio fílmic local?
Cuando recuperamos una película estamos salvo fragmentos de nuestra historia. Salvarla quiere decir visionarla, saber qué hay dentro y catalogarla debidamente. Se trata de guardar para difundir y dar a conocer, con el objetivo de que la gente vuelva a disfrutarlo, valoritzi el patrimonio y que los historiadores y documentalistas puedan usarlo.

Cómo es el trabajo de investigación?
Como una apuesta al azar. Puede ser un trabajo de semanas, meses e inclús años contactar y encontrar a un cineasta. Después de muchas gestiones, viajes y entrevistas puede ser que la persona conserve material pero no quiera depositarlo, que las películas ya se hayan tirado o que encuentres las encuentres cuando ya se han echado a perder.

También recuperáis archivos familiares...
Quizás pensamos que una imagen sólo es importante si sale tal persona o es de un acontecimiento histórico, pero no. Las películas familiares tienen un valor importante porque explican como vivía y como era la sociedad en aquel momento. La vida cotidiana en la calle de la gente trabajadora, los bautizos y casamientos, los años de transición... Esto es muy valioso.

Qué nos puedes decir de la historia del cine en Mataró y el Maresme?
Hemos tenido muchos cineastas y mucha afición en el cine. Desgraciadamente muchas cosas que se filmaron antes de la guerra se han perdido pero, en 40, surgió aquel cine amateur, tan creativo e innovador, con nombres como Enric Fité, Joan Ciruela o Josep Punsola. Encontraron un medio para expresarse y el cine se volvió a valorar.

Cómo afecta el paso del cine en celuloide al cine digital?
Es un problema. Todos estos nuevos formatos que han surgido son extraordinariamente débiles y se tendrá que hacer un estudio muy serio y profundo de cómo conservarlos. Además, se tendrá que ser más selectivo, puesto que la proliferación y el volumen de imágenes que se puede generar ahora sobre un mismo tema puede ser inmenso.
il