Por lo menos una vez la Policía Local de Mataró y los Mossos d'Esquadra llevan a cabo operativos conjuntos específicos en bares y otros establecimientos de la ciudad considerados conflictivos, que han sido señalados por los vecinos y vecinas como focos de problemas de convivencia.
En esta ocasión, el foco de la operación ha estado en los barrios de Cerdanyola y de Cirera, donde los agentes han llevado a cabo, este fin de semana pasado, la inspección de un total de tres locales que acumulaban denuncias en este sentido.
La redada policial se ha saldado con un total de dos personas detenidas. Además, se han levantado siete denuncias por tenencia y consumo de drogas entre los clientes que fueron registrados. A cuatro de ellos, además, se los denunció por posesión de objetos peligrosos, como por ejemplo elementos punzantes.
En total, 76 personas entre propietarios y clientes de estos bares fueron identificados durante el operativo, en la línea de acciones similares llevadas a cabo anteriormente, sobre todo en los barrios de Cerdanyola y Rocafonda
Comentarios (5)