Roban más de 20 móviles y tablets en una escuela de Mataró

Un grupo de alumnos de primero de bachillerato de la escuela Maristes Valldemia de Mataró sufrió un robo el pasado jueves, día 20, a mediodía. El ladrón se llevó un abundante botín de material audiovisual y electrónico, puesto que los sustrajo más de 20 móviles, tablets y ordenadores, así como otros aparatos y objetos, mientras los estudiantes llevaban a cabo una actividad de educación física. Los Mossos han detenido un menor de edad implicado en los hechos, que al ser arrestado llevaba encima diverso del material sustraído.

Según han explicado a Capgros.com familiares de las víctimas del robo y han confirmado desde el mismo centro educativo mataroní, los hechos tuvieron lugar hacia la 1 del mediodía. Una treintena de alumnos de un grupo de bachillerato , de entre 16 y 17 años, habían dejado sus mochilas y el resto de pertenencias al vestuario, mientras llevaban a cabo la última clase de la jornada, de la asignatura de Educación Física, en el gimnasio del pabellón de la escuela.

En aquel momento, tal y cómo destacan desde Valldemia, los accesos de la escuela estaban cerrados. Aún así, uno o varios ladrones consiguieron acceder al equipamiento y llegar hasta el vestuario, del cual sustrajeron todo el que pudieron. Los familiares de los adolescentes explican que una trabajadora de la limpieza de Valldemia habría visto un joven encapuchado y con mascarilla rondando por las instalaciones del pabellón deportivo a la hora que se produjo el robo.

Al volver al vestuario, una vez finalizada la actividad física, los alumnos se encontraron con todas sus pertenencias revueltas y dispersadas por el suelo. Los ladrones tuvieron tiempos de llevarse entre 20 y 25 móviles, así como Ipads y otras tablets, ordenadores, auriculares, mochilas, o monederos con dinero y documentación, entre otros. Las familias se preguntan cómo se lo hizo los autores para entrar al vestuario, puesto que teóricamente la puerta de la sala estaba cerrada con llave.

Desde Valldemia destacan que inmediatamente la escuela se puso en contacto con los Mossos d'Esquadra para explicar el que había pasado. La policía se presentó rápidamente en el centro y, viendo los hechos, recomendaron la recogida de denuncias de manera individual por parte de todos los alumnos que habían sufrido el robo.

Al tratarse de aparatos electrónicos sofisticados como por ejemplo Iphones, las propias víctimas pudieron trazar la geolocalización de sus móviles y mesitas justo cuando se dieron cuenta que los habían sido sustraídas. Pronto pudieron comprobar que algunos de los citados aparatos estaban en diferentes calles del barrio de Rocafonda de Mataró, donde se habría dirigido el ladrón o grupo de ladrones que habían cometido el robo.

Con estas y otros datos, el mismo jueves día 20 por la tarde los Mossos d'Esquadra detuvieron a un chico menor de edad que estaría implicado en los hechos. Según ha confirmado el cuerpo policial, en el momento de la detención, el joven llevaba 8 Iphones encima, aparatos que pertenecerían a los alumnos del centro educativo mataroní. El menor pasó a disposición del ministerio fiscal, que decretó la libertad con medidas cautelares. La investigación policial sigue abierta para localizar otras implicados en los hechos.

Desde Valldemia constatan que "lamentamos muchos los hechos, y seguimos en contacto con la policía para colaborar con la investigación que están haciendo". Por otro lado, la dirección del centro está "valorando cómo se produjo el acceso a la escuela de cara a revisar las medidas para aumentar la seguridad a las entradas", según señalan. Además, han querido agradecer a los alumnos y a las familias su colaboración.

Los robos en centros educativos mataronins se ha convertido en un problema recurrente en los últimos años, hasta el punto que ha habido que reforzar la seguridad de varios de estos equipamientos, como por ejemplo el Instituto Escuela Mar Mediterránea, a raíz de los asaltos continuados que han sufrido. Los aparatos electrónicos de los estudiantes, como por ejemplo las tablets, acostumbran a ser el botín más preciado por parte de los ladrones.