Basta. Con este clamor tanto explícito los clubes deportivos mataronins, conjuntamente con el resto de entidades catalanas, recuerdan que la gota ha hecho derramar el vaso y que están cansados, hartos y enfadados. Basta, dicen, de ser una de las principales víctimas propiciatorias de las sucesivas restricciones gubernamentales contra la Covid y que todos sus esfuerzos para blindar la actividad deportiva como segura no sean tenidos en cuenta. Se sienten víctimas de un agravio que amenaza directamente su presente y futuro: sin competiciones y con la actividad condicionada, cuando se podrá recuperar la normalidad deportiva?
Diferentes clubes se han sumado a la campaña ‘Basta’, sea con acciones simbólicas antes de los pocos partidos que se pueden jugar, con lecturas públicas del manifiesto compartidas a redes, extendiendo la campaña de adhesiones o incluso con una concentración de protesta en la Plaza de Santa Anna, el pasado sábado, convocada por la Unión Deportiva Mataró.
El manifiesto recoge el clamor de un sector que se siente singularmente desatendido y maltratado y denuncia que “el Gobierno no dispone de ningún estudio, ni de ninguna certeza, que certifique que la práctica deportiva organizada sea ningún foco de contagio ni de propagación del virus”. Los clubes constatan que son “el sector más castigado y criminalizado” y denuncian que los gobernantes “desconocen la realidad del deporte de base y sus beneficios”.
El agravio respete otros ámbitos
El manifiesto se queja que “viendo como se permite la asistencia a cines, teatros, salas de conciertos, auditorios, actos religiosos y circos a los 50 por ciento de su capacidad, nos sentimos desconcertados e impotentes al no recibir el mismo trato. Qué puede ser la razón a este agravio?” y alertan que la suspensión de competiciones también es “un agravio respete la mayoría de clubes que disputan ligas a nivel español”. ‘Basta’ acaba asegurando que las medidas actuales provocan un “daño a los clubes deportivos que, sin ningún apoyo ni ayuda, hace tambalear y pose en peligro uno de los tesoros del país”.
Los clubes mataronins contienen la respiración, calculan daños y se miran el calendario con preocupación. El nuevo paquete de restricciones con el que se estrenó este 2021 no deja de ser un episodio más de la escalada de restricciones de los últimos tiempos. “La situación nos está afectando a nivel anímico porque la base tiene ganas de entrenar, de jugar partidos y de competir y están a la espera de ver cuando podrán empezar las competiciones”, explica José Maria Lizán, presidente del Juventud Balonmano Mataró.
Sin moverse de Teresa Maria Roca, el coordinador del Futsal Mataró David Rivera explica que “el club gestiona 32 equipos: los cuatro nacionales entrenan casi con normalidad y los 28 equipos restantes con las nuevas restricciones, no pueden llevar a cabo práctica deportiva ni a pabellón, ni a las pistas de las escuelas con las que tenemos firmados convenios. Entre las pistas municipales de La Llàntia y Cerdanyola tenemos seis horarios entre semana. Nuestra intención es como mínimo poder dar el servicio de un entrenamiento semanal a cada grupo. Estamos trabajando conjuntamente con Deportes de Ayuntamiento para lograrlo”.
La actual situación de duras restricciones, si es prolongada en el tiempo, puede acabar para cancelar o modificar las competiciones, un extremo que ya plantea como posible Fran Seijo que es el Presidente del CE Mataró. “Nosotros tal como va la cosa creemos que será difícil que esta temporada se pueda jugar. La situación por el club es complicada y nos tenemos que adecuar a una forma de trabajar muy diferente”.
LAS CLAVES
Con la actual situación, que se puede alargar, los equipos de base solo pueden entrar en instalaciones deportivas al aire libre
Los clubes, sin poder ofrecer los entrenamientos y partidos, se ven obligados a perdonar o rebajar cuotas a las familias
Sin un horizonte claro en cuanto a las ligas, los equipos pierden motivación e implicación al entrenar: se vive a un llimb competitivo
Los clubes tienen que afrontar nuevas obligaciones, de organización de grupos y espacios y de protocolos sanitarios
El deporte se reivindica como fomento de salud y sector seguro contra la Covid; solo un 6% de los contagios se produce entre niños
Las entidades no pueden ejercer su día a día de forma habitual y, por el contrario, hay un ‘boom’ de práctica deportiva no reglada al espacio público
que se autoricen entrenamientos en grupos y el uso de las instalaciones
Volver a ser víctimas del nuevo paquete de restricciones posterior a las fiestas de Navidad ha sido un cubo de agua fría para muchos clubes deportivos y también por otros actores dentro de este mismo sector como el deporte escolar. El espantajo de volver a perder la temporada está y el que ahora misma preocupa más son dos caras de una misma moneda: la una, que no ven claro cuando podría revertir la situación general porque Generalitat y Procicat puedan cambiar de actitud hacia el deporte de base. El reverso de esta misma cara es la economía de las entidades: está muy tocada.
“Con la economía tenemos que ir con mucha cura puesto que no tenemos ingresos de esponsors, socios y si la situación dura mucho más, la amenaza puede ser fuerte”, explica el máximo responsable del CE Mataró. Su homólogo del Juventud Balonmano va en la misma línea y pose en valor que “de momento la base está respondiendo y hay poca afectación en las cuotas pero nos podrían pedir más gestos si esta situación de alarga”. Si los clubes no pueden pasar las cuotas, se quedan de facto sin su principal vía de financiación.
Cómo se puede salvar el año?
En espera de una mejora de la situación, los diferentes clubes locales tienen diferentes ideas sobre cómo se podría intentar “salvar” la presente temporada. Desde el Futsal Mataró David Rivera explica que “entendemos que la práctica deportiva del deporte amateur tiene que poder realizarse puesto que la actividad física es un bien esencial pero también tenemos muy presente, que esta temporada no tiene ningún sentido plantearse competir los fines de semana desplazándose para jugar partidos. Este servicio tendría que ser interno a cada entidad y población”.
Rivera asegura que “actualmente con una buena planificación se pueden hacer entrenamientos con un grupo de seis a media pista y otro grupo de cinco con el entrenador y que los niños juegue, se divierta, aprenda y desconecte de la dureza de la situación actual, por eso creemos que el deporte es esencial por la vida que nos toca vivir. Tenemos que defender y promover que se habiliten procedimientos para permitir la práctica deportiva sin riesgo”.
José Maria Lizán, del Juventud Balonmano Mataró reclama que “es viable que un grupo de 10 o 12 niños pueda entrenar y participar de un partido, si en un teatro de 500 plazas entren 250 a disfrutar de una obra” y desde el CE Mataró Fran Seijo pide que se permita la movilidad entre municipios con motivo de la práctica deportiva, del mismo modo que hay otras excepciones al confinamiento perimetral.
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