Messi es el nombre del momento. El crac azulgrana va emete un burofax para comunicar al FC Barcelona su intención de abandonar el club de manera inmediata. No es necesario repasar el historial del mandato de Josep Maria Bartomeu y su junta para entender la decisión del '10' argentino, pero sí es buen momento para conectar el astro argentino con Mataró. Messi debutó con el primer equipo del Barça el octubre de 2004 en un derbi con el Espanyol, con Rijkaard de entrenador, pero su debut en categorías absolutas fue antes, y fue ante el conjunto de la capital del Maresme.
Era un 6 de marzo de 2004, siete meses antes de estrenarse en el primer equipo como el más joven al conseguirlo, cuando el delantero, estrella absoluta del juvenil azulgrana, se enfrentó al CE Mataró de Joan Vilà. El partido se llevó a cabo al Mine Estadio, donde los azulgranas, cuartos con 46 puntos, luchaban para mantenerse en promoción de ascenso. Messi fue titular en un equipo donde también había jugadores como Jorquera -que fue portero gualdinegro-, el ex-entrenador mataronense Alberto Aybar, entre otros. Messi demostró su calidad con aquellos arranques, regados en un palmo de terreno de juego y diagonales imposibles.
Del estreno con el Español al burofax
Pocos meses después debutaría con Rijkaard, iría creciendo como jugador, explotaría definitivamente con los mejores años de Pep Team y, después del triplete con Luis Enrique, siendo el faro de un equipo y un club cada vez más decadente y que ha tocado fondo en un 2020 que, parece, se lo llevará todo por delante (menos a Bartomeu). Faltará ver si finalmente el adiós de Messi se consuma como todo parece indicar después del burofax enviado al que ha sido el club de su vida.
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