El Hospital y los CABEZA de Mataró se preparan para recuperar la actividad suspensa

Se empezarán a reprogramar las citas anuladas por el coronavirus a pesar de que la reapertura será progresiva y muy condicionada por las medidas de seguridad e higiene

Todos los mataronins y mataronines que tenían pruebas médicas y visitas ordinarias y no urgentes han visto cómo, en los últimos dos meses, han sido suspendidas sine die debido a la emergencia sanitaria provocada por el coronavirus. El Consorcio Sanitario del Maresme, que gestiona el Hospital de Mataró, el sociosanitario Santo Jaume y los CABEZA de Mataró Centro y Cereza-Molins (además del de Argentona) suspendió a mediados de mes de marzo toda la actividad ordinaria para poder hacer frente a todos los casos urgentes de covid-19. Ahora que el número de ingresos por coronavirus se está reduciendo, los centros médicos mataronins se preparan por un progresivo regreso a la normalidad.

La reapertura, pero, será progresiva y muy condicionada a las medidas de prevención y seguridad que hay que tener presentes mientras la epidemia se mantenga y todavía haya pacientes con Covid-19 ingresados al Hospital de Mataró.

Estos son las medidas que se aplicarán en el Hospital y el resto de centros médicos gestionados por el Cónsorci Sanitario del Maresme

Controles de acceso a los centros para asegurar las medidas de prevención necesarias –mascareta, higiene de manso, distancia de seguridad. El objetivo es garantizar la seguridad tanto por los pacientes cómo por los profesionales.
Evitar aglomeraciones. El número de visitas programadas se reducirá para evitar que haya demasiada gente a las salas de espera. La presencia de acompañantes, por lo tanto, también eestarà restringida. Los protocolos de limpieza que hay que aplicar entre paciente y paciente mientras el riesgo de contagio sea presente hará que se reduzcan la cantidad de pruebas a hacer cada día.
El mìnim contacto físico posible. Para prevenir contagios se ampliará la teleassistència, que ya utilizan algunos servicios, de cara a reducir el contacto físico entre médico y paciente a los casos imprescindibles.
Orden por prioridad. Se citará los pacientes que más lo necesiten, en ninguna parte de mantener el orden cronológico de las citas que ya estaban programadas. Los médicos responsables priorritzaran las intervenciones quirúrgicas, las visitas a los especialistas y las pruebas diagnósticas en función de la patología y del estado de salud de cada paciente.
Reprogramación telefónica. Esta semana los centros médicos empezarán a trucar los pacientes, empezando por los que necesiten ser atendidos de forma prioritaria y, progresivamente, se irá contactando el resto de personas. Desde el Consorcio se pide paciencia y comprensión a las personas que tienen citas programadas y que tarden al ser contactadas, puesto que la lista de llamadas pendientes es muy larga.