30 millones para luchar contra la pérdida de arena a las playas del Maresme

Un ambicioso plan para acabar definitivamente con la pérdida de arena de las playas del Maresme. Así se presenta el nuevo proyecto de la Dirección general de Costas, que depende del Ministerio de Medio ambiente. El organismo aportará 30 millones en los cercanos 15 años para financiar la construcción de nuevos espigones en los cuales apoyar la aportación de arena a lo largo de toda la comarca. Los alcaldes y el Consejo Comarcal lo ven con buenos ojos pero con un cierto escepticismo, puesto que el plan necesita 20 millones más para cumplirse y de momento no se sabe de donde saldrán este dinero.

El director general de Sostenibilidad de Costa, Pablo Saavedra, presentó el pasado viernes a la Generalitat, al Consejo Comarcal y en los Ayuntamientos su nuevo plan. El objetivo es acabar de una vez por todas con un problema recurrente a la comarca: la constante pérdida de arena de las playas, fruto de medidas como la construcción en los últimos 30 años de muchos puertos deportivos. En esta primera reunión, después de hacer un diagnóstico de la situación actual, el organismo presentó un plan de actuaciones que se tiene que ejecutar en los cercanos 15 años y que requerirá 50 millones de euros. 30 de estos millones los aportaría directamente el Ministerio, mientras que los otros 20 los tendrían que financiar el resto de administraciones. Según recoge el ACN, pero, Saavedra apuntó en la reunión que este dinero también podrían provenir, en parte, de empresas privadas del territorio vinculadas al turismo.

El Ministerio había estudiado dos opciones: seguir abocando arena, como se ha hecho hasta ahora sin muchas buenos resultados (la arena que se aboca se acaba perdiendo con los temporales del invierno y hay que repetir la medida casi cada año), o bien la que se ha acabado aprobando, que es la de construir nuevos diques o espigones en los cuales apoyar esta arena, de cara a evitar precisamente esta pérdida. Según el Estado, habría que invertir 4,2 millones de euros cada año. El proyecto divide el litoral en 3 zonas entre Tordera y Arenys; Arenys y Mataró; y la capital del Maresme hasta el Besos. Las actuaciones se irían desarrollando en las zonas con una prioridad más alta atendiendo criterios sociales, medioambientales, económicos y de seguridad. Premià de Mar y el Masnou tendrían que ser los primeros municipios donde se hagan intervenciones, que se repetirán a prácticamente todos los municipios de la costa del Maresme, Mataró incluido.

Entre el optimismo y el escepticismo
El presidente del Consejo Comarcal, Miquel Àngel Martínez, hizo una valoración muy positiva de la reunión y explicó que este es un buen punto de partida para solucionar el histórico problema de degradación del litoral maresmenc. En cuanto a los alcaldes y a la Generalitat, se mostraron satisfechos porque se trata de una proyecto a largo plazo que evita las soluciones de urgencia. Pero también hubo voces más escépticas ante la parte del proyecto pendiente de financiación. Tampoco está muy claro cuando empezarán las obras y qué será su calendario.