PUMSA, y ahora qué?

A pesar de que hace años que se habla, la mayoría de la gente de Mataró desconoce qué carai es esto de PUMSA. El que fue el buque insignia de los gobiernos de mayoría socialista, coligados o no, resto a la expectativa, sin que nadie pueda asegurar si tendrá una muerte digna.

Pero qué fue su origen? Qué justificó su creación? Cómo se lo hicieron sus gerentes para convertirse durante años en el auténtico "sottogoverno" de la ciudad y, finalmente, cómo se fue pervirtiendo aquello que inicialmente podía ser loable como instrumento de desarrollo urbano rápido y eficaz en defensa del interés del común para acabar aconteciendo, con demasiada rapidez, en un potente acorazado defensor de proyectos de ciertos grupos privados, que hacía vestidos a medida del mercado inmobiliario y que el sastre de Panamá consistorial se limitaba a emprovar?.

Hace pocas semanas el Ayuntamiento de Mataró recibió un nuevo revés judicial, este ya definitivo, en el larguísimo caso del sobrecoste del edificio de el Rengle

Merece la pena que lo decimos claro. Los modos verbales "de ahora requalifico aquí y descatalogo allá". "Hoy conservo la antigua nave y después mando su escombro", fue una dinámica diabólica que empobreció la ciudad y la volvió periférica y suburbial.

Todo ello hizo que se olvidaran los principios de seguridad jurídica de los administrados, de igualdad entre los ciudadanos y por los cuales nadie puede ir contra sus propios actos, para dar a la suprema arbitrariedad.

Por eso no tiene nada d´extraño que, días sí y otros también, los problemas judiciales de los acuerdos adoptados por PUMSA, hipotequen las posibles inversiones municipales durante algunos años. Vaya, que gastamos una fortuna al sufragar gastos judiciales.

Hace pocas semanas el Ayuntamiento de Mataró recibió un nuevo revés judicial, este ya definitivo, en el larguísimo caso del sobrecoste del edificio de el Rengle. El Ayuntamiento, además de no recuperar el dinero del supuesto sobrecoste, tendrá que pagar las costas del juicio, que se elevarán a unos 100.000 euros, aproximadamente.

La noticia ha vuelto a pone en la palestra a PUMSA, ahora que ya parecía que nadie se acordaba de tan triste existencia.

El Sr. Bote ha pasado de puntillas, haciendo dar explicaciones al subalterno de turno, del enésimo capítulo oscuro protagonizado por la empresa municipal.

Se puede decir que el afartament de la ciudadanía con estos temas, juega a favor del primer edil y el resto de los silenciosos regidores del gobierno. Parece cómo si Mataró haya renunciado a hablar de un asunto que lleva cronificat años y cerraduras.

Ante la pregunta de por qué tenía que ser útil por el futuro, una empresa que el pasado había cometido tantos errores cómo para acontecer casi insostenible y que ha arrastrado el Ayuntamiento hacia una situación económica tan delicada, los responsables políticos municipales siempre han defendido que PUMSA en sí no es el problema, sino que este radica en "las decisiones que tomaron aquellos que dirigían la empresa". Mal asunto, pues, si se reconoce que los gobiernos no gobiernan y que todo se culpa d´unos gestores, parece ser, designados por una mano anónima. Todo ello uno de los grandes chistes consistoriales!

El momento es bastante grave en un contexto complicado para conciliar generación de actividad económica a nuestra ciudad

La realidad actual, es que la empresa cuenta con cuatro líneas de servicio (Oficina local de Vivienda, Gestión de Patrimonio, Gestión del estacionamiento de vehículos y la Oficina Técnica) que nos podríamos ahorrar, en la mayoría de casos, haciendo una gestión directa a través del consistorio. El debate sobre PUMSA llega, necesariamente, subordinado en un debate superior: qué servicios se tienen que prestar desde el Ayuntamiento? Cómo se tienen que prestar?

El momento es bastante grave en un contexto complicado para conciliar generación de actividad económica a nuestra ciudad. No podemos agravar la situación posando palos a las ruedas añadiendo tiempos burocráticos y generando graves perjuicios para no tener una buena planificación de nuestros servicios municipales. Es algo que hace tiempo que está pasando, por ejemplo, con el servicio de licencias municipales. En este sentido hay que recordar la propuesta que desde Juntos por Mataró -trabajada con diferentes Colegios Técnicos Profesionales, Gremios de Constructores, notarios y Cámara de la propiedad, actores fundamentales del proceso constructivo- para mejorar el tiempo de expedición, así como centrarnos en el proceso de rehabilitación urbana a nuestra ciudad. La pelota es al tejado del Gobierno municipal.

Hay que rediseñar, reformular… En resumen, hay que adaptarnos a las nuevas dinámicas, y en este caso, es evidente que PUMSA como estructura empresarial que presta servicios en el Ayuntamiento de Mataró, ha quedado obsoleta respecto a su objeto, así como en su funcionamiento.

No podemos seguir manteniendo estructuras deficitarias que requieren de la aportación municipal por su viabilidad solo porque se ha hecho toda la vida. Hay que replantearnos lo qué y el cómo. Solo así podremos hacer un ejercicio de racionalización y rebajar el gasto municipal, que en el caso de PUMSA supone hasta 2,52 millones de euros en aportaciones de los presupuestos públicos por el año 2021.

Gustará más o menos, pero nosotros ya hemos decidido que este derroche se tiene que acabar. A Mataró vamos tarde al posar sobre la tabla el debate sobre la organización que hace falta en relación al modelo de ciudad y los retos de futuro del municipio que necesitamos. Y después de seis años de gobierno, son debates que tendrían que haber empezado ya hace tiempos.