Los dos mataronins en su viaje en Filipinas.

Salva Fernàndez

Dos mataronins, atrapados en Filipinas por el coronavirus; de luna de miel a odisea para volver

El matrimonio de Aleix Tarrés, capitán de la UD Cereza, y Estrella de Martín, intentan volver a España en medio del caos, toque de queda y controles exhaustivos sobre cualquier con pasaporte español.

El que tenía que ser el viaje de sus vidas, convertido en una odisea y en momentos que se asemejan más a un infierno. Aleix Tarrés, capitán de la UD Cereza, y Estrella de Martín, reciente casados, viajaron a Filipinas para celebrar su luna de miel, pero en medio del viaje estalló la crisis del coronavirus y ahora se encuentran retenidos en el país, con una embajada que se desentiende y sin saber cuando ni como podrán volver a Mataró. "Volvíamos el 26 de marzo, pero ya hace cuatro días que interrumpimos el viaje para intentar volver ante la crisis en la que nos encontramos", explica Tarrés, que desde el estallido de la pandemia por coronavirus han tenido que luchar contra todo, incluida la embajada española, para conseguir dejar atrás el que se está convirtiendo en una odisea: "A la embajada española nos dijeron que no era su problema que nosotros, con ingresos limitados porque somos trabajadores, tuviéramos que estar 40 días cerrados; los pregunté si tenía que pedir almoïna por la calle y me dijeron que si era el que consideraba, que estaba bien. Me da vergüenza explicar como nos han respondido", lamenta.

Intentar volver a España lo más bien posible se los está suponiendo males de jefas, noches sin dormir y un coste económico importante. "Nos lo tenemos que pagar todo para buscarnos la vida, cogimos un vuelo hacia PuertoPrincesa , un golpe allá no nos dejaban salir y nos tuvieron retenidos en un 'zulo' durante horas. Ahora nos han dicho que podremos salir de la isla y hemos pagado un vuelo de 350 euros hacia Clark, donde esperemos poder coger un vuelo de vuelta", relata. La idea que tienen es conseguir un vuelo con Qatar Airways, su compañía, para avanzar el regreso, pero admiten que "nadie nos lo garantiza, o que se'sn dé un vuelo y después se cancele...". La voluntad de Tarrés y Martín es simplemente volver a casa: "Perdemos el viaje y volvemos, no tenemos ni ganas ni ánimos de nada más; nos han dicho que todo esto irá a peor".

La situación no es precisamente agradable para españoles que se encuentren ahora mismo en Filipinas. En el país hay el ejército desplegado por Manila, donde se ha decretado toque de queda de las cinco de la mañana a las 20h, y hay controles exhaustivos a todos los que tienen pasaporte español: "Hay controles militares cada 45 minutos mirando la fiebre, en el 'zulo' donde estábamos han entrado médicos en tromba tratándonos cómo si estuviéramos enfermos en una prisión; traemos tres días sin dormir, es de locos".

Su esperanza es que un golpe a Clark, un aeropuerto que puede ser similar al de Girona para Cataluña, las autoridades los dejen marchar puesto que si "demuestras que te quieres ir, quizás te dejan", pero los mataronins son conscientes que con las restricciones actuales y las que se pueden implantar en las próximas horas, la situación se puede complicar.

El consulat contesta en las redes

Desde las redes sociales, esta mañana, el Consulat español en Manila ha respondido a la petición de ayuda de familiares de españoles retenidos al país que están "hablando con las autoridades para poder mantener quieres y ayudarlos". En otra respuesta, afirman que se ha hablado con las autoridades y se ha eliminado la cuarentena al aeropuerto de Cebú , por el que es de esperar que puedan solventar su situación lo más bien posible.