El proceso de privatización de Mataró Energía Sostenible (MESSA), la empresa que gestiona el Tubo Verde, ha dado su último paso. Gas Natural Fenosa ha comprado el 51,1% de la sociedad municipal por 3,96 millones de euros. El presidente de MESSA, Miquel Rey, afirma que la operación "no sólo garantiza la solvencia y el desarrollo del Tubo Verde, sino que asegura la viabilidad de la empresa y ahorra de cerca de un millón de euros al año".
La privatización de MESSA arrancó el mes de febrero de 2014. El primer concurso público, pero, quedó desierto. Ahora se ha llegado a buen puerto con Gas Natural después de un proceso negociado cerrado. El consistorio argumentó la necesidad de venderse la compañía por las pérdidas que acumula, de entre 300.000 y 400.000 euros al año, y por la incapacidad del Ayuntamiento de hacer frente a las inversiones necesarias para frenar las pérdidas.
Críticas de ICV-EUiA
Uno de los partidos que más en contra se ha mostrado de este movimiento es ICV-EUiA, que ha emitido un comunicado para denunciar la operación. "Se trata de una muestra más de la política de capitalismo de amiguets del partido de Joan Mora", afirma el regidor Esteve Martínez. Según ellos, "CiU engaña la ciudadanía cuando dice que con la venta a Gas Natural Fenosa se podrá salvar una empresa supuestamente inviable económicamente". El regidor ecosocialista ha subrayado que "una empresa como Gas Natural Fenosa nunca compraría una empresa que no es viable".

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12 años de Tubo Verde
El Tubo Verde se impulsó al año 2003. Se trata de una red urbana de distribución de frío y calor que cuenta con un centenar de clientes, sobre todo equipamientos municipales como el Hospital, escuelas y polideportivos. En total, son más de 18 kilómetros de cañerías. El sistema aprovecha la energía sobrante de infraestructuras ambientales existentes a la ciudad como la depuradora.
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