La pandilla del basilisc cautiva a pequeños y grandes a l’encendida

El acto propio que la pandilla de diablos "Pandilla del Basilics" realizó por primera vez, en el marco de las santas, tuvo un gran recibimiento por parte de la ciudad. El pasacalle empezó a las siete y media desde la plaza del ayuntamiento y hasta la plaza de Can Xammar donde seva teatralitzar un baile de diablos presentando sus personajes, lucífer y la diablesa. Estos dos personajes llevaron a cabo el que se denomina lucimiento, que se trata de ir tirando círculos entre ellos, acompañados por el fuego a la vegada que serecitaron unos versos, siguiendo la tradición propia de los bailes de diablos centeranis. 

Un golpe finalizada esta presentación, la pandilla subió hasta la plaza de Santa Maria sin fuego y con los tambores. Con la plaza atestada se repartieron un total de 200 tickets para que los niños y niñas de la ciudad se pudieran poner la ropa de los diablos y pudieran hacer ir una carretilla de fuego. Se trataba de una carretilla con poca potencia para que no tomaran mal. En tres puntos situados alrededor de la plaza, los niños y niñas podían probar la experiencia de hacer de diablo durante unos minutos. El único requisito era que fueran mayores de 6 años para una mejor seguridad. Además, la pandilla llenó una serie de hojas con el nombre del niño y su tutor con el fin de tener un control de cada uno de los participantes en caso de accidente o pérdida y duplicado del ticket. Un golpe finalizada la proba de vestidos y fuego, el pasacalle continuó hasta la plaza del ayuntamiento donde finalizó el acto.