Que Mataró es una ciudad con grandes desigualdades internas a nivel social ya es una cuestión conocida hace décadas y no es un fenómeno nuevo. Pero cada vez más los diferentes indicadores descriptivos disponibles están dibujando una ciudad altamente segregada. En barrios como Rocafonda o lo Palau, la mitad de las familias están en situación de riesgo de pobreza, como posan de manifiesto los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística.
Seguramente el modelo de crecimiento urbanístico, los efectos de desplazamiento de unos barrios a otros denominado como proceso de sustitución de unos vecinos y vecinas por otros, el dinamismo y problemática del mercado de la vivienda, los nuevos perfiles poblacionales y el hecho migratorio internacional, la proximidad de la grande Barcelona, las diferentes crisis y los cambios en el mercado de trabajo, así como el modelo de provisión global del bienestar algo tienen a ver en la centralización de las vulnerabilidades donde a menudo causas y consecuencias se alternan. Y estos procesos impactan de forma negativa en algunos lugares de la ciudad.
Cada vez hay más datos que nos ayudan a visualizar esta realidad. Hay muchos indicadores de vulnerabilidad, pero los indicadores de tipo económico facilitan tener una ilustración gráfica del dinero que ingresan las familias y como estos determinan la riqueza material pero también el acceso a bienes y servicios.
Un ejemplo son los que recientemente ha posado a disposición el Instituto Nacional de Estadística que permiten bajar al nivel de sección censal, que más allá de los problemas metodológicos o los elementos propios de la discusión académica, ofrecen ver como la pobreza monetaria se concentra de manera en algunos barrios y zonas urbanas.
Renta mediana por persona a Mataró
Una de las primeras conclusiones que se pueden extraer es que el Maresme continúa siendo una comarca rica con presencia de municipios con mayor renta del país. Ahora bien, esta comarca tiene algunos espacios concretos con los mayores porcentajes de pobreza y que primordialmente se concentran en su capital y de manera particular en 3 barrios. Una segunda conclusión es que este fenómeno de concentración se está acelerando. Pero no es un proceso no único de Mataró, puesto que es muy similar en algunas zonas de Badalona, Santa Coloma, Sabadell, Terrassa, Girona o también a Manresa, Lleida y Tarragona.
Pero en el caso de Mataró, como tercer elemento a subrayar, es que empieza a destacar sobre otras ciudades por la gran distancia interna que lo está conformando como una población cada vez más dual.
Por ejemplo con relación al umbral de pobreza, que se calcula a partir de tener ingresos por debajo del 60% de la renta mediana, el Palau y la parte baja de Rocafonda presentan porcentajes por encima del 45%. Es decir, de manera mucho planera podríamos decir que la mitad de las familias están en situación de riesgo de pobreza. Un fenómeno que también se coge al tramo bajo también del barrio de Cerdanyola pero con algunos puntos porcentuales inferiores. Al otro lado hay zonas como la Vía Europa o el Centro histórico donde los porcentajes son muy bajos.
Vista del barrio de Rocafonda
Dedo también de otro modo y sin apreciar de donde venden los ingresos, la renta mediana de una persona que vive a Vía Europa, el Eixample o al Centro Histórico es de 2,7 veces superiores a una persona de Rocafonda o de casi de 2,5 a una del área que compran el centro o la zona baja de Cerdanyola. Y por supuesto, esta proporción aumenta considerablemente si se compara con el resto de municipios de la comarca.
Pero esta descripción se queda a las puertas del año 2018, que es el último año donde hay datos disponibles. Cómo se sabe, con posterioridad ha habido uno trasbals que ha supuesto la situación de pandemia sobre el trabajo, los ingresos familiares... y que estará es muy presente. Por lo tanto, habrá que ver cómo han impactado en la ciudad pero la percepción inicial parece que continúa la senda de aumentar las desigualdades y la fragmentación social.
Y esta concentración acelerada de las pobrezas, de las privaciones, de las vulnerabilidades justifica la necesidad de centrar la atención para desarrollar políticas públicas desde diferentes vertientes para actuar en una ciudad y en una Cataluña con diferentes velocidades y con un gran proceso segregador y de polarización social con consecuencias sobre el día a día y el bienestar de las personas.