Los parques infantiles de Mataró necesitan mejorar

Dicen que la manera en que una sociedad trata a sus niños dice mucho sobre sus prioridades. Así, las áreas de juego infantil no son solo espacios para el entretenimiento, sino símbolos de cuidado comunitario y de apuesta por el futuro. En Mataró, esta reflexión tiene un peso especial: con más de 120 áreas de juego y más de medio millar de elementos repartidos por toda la ciudad, estos espacios deberían ser lugares de encuentro, de crecimiento y de felicidad. Pero, ¿lo son realmente?

Más allá de la certeza de que, a menudo, las redes sociales amplifican solo una parte de las noticias y las distorsionan a la baja, es evidente en grupos de Facebook o en los -a veces- temidos grupos de familias de escuela la mala percepción de muchos mataronenses hacia las áreas de juego infantil de la capital del Maresme. Las quejas acumuladas por las familias apuntan a un escenario complejo: problemas de mantenimiento, suciedad e incivismo. Una realidad que exige acciones urgentes que el propio Ayuntamiento asume en primera persona en cada presupuesto y plan de acciones.

El incivismo es el factor clave de su mal estado

No hay soluciones milagrosas para planes integrales, pero la inversión es sostenida… aunque siempre habrá quien la juzgue insuficiente. También es característico de Mataró, la ciudad catalana con más perros por habitante, que esta particular ‘crisis de las áreas de juegos infantiles’ contraste con el ambicioso despliegue de las zonas de ocio animal.

A primera vista, las áreas de juegos infantiles de Mataró parecen numerosas y bien distribuidas. Pero, como ocurre a menudo, la realidad que viven las familias no siempre coincide con las apariencias. Las redes sociales, los grupos de madres y padres y las quejas recogidas en el teléfono 010 del Ayuntamiento han evidenciado un problema creciente.

Los problemas son variados y, en muchos casos, alarmantes. La madera deteriorada en zonas como Pintor Estrany, donde una caseta infantil parece más un elemento de desecho que un espacio para jugar, o pavimentos en mal estado y mesas rotas en otras áreas son solo algunos ejemplos. "La situación en algunas zonas es tan mala que preferimos llevar a nuestros hijos a municipios vecinos para jugar", comenta Montse, una madre del barrio de Rocafonda.

También es habitual ver columpios vandalizados o antiguos parques infantiles que, por desidia, han acabado convertidos en pipicanes improvisados. En algunos casos, son los propios vecinos o propietarios de negocios cercanos quienes han asumido el mantenimiento mínimo de las instalaciones, una tarea que no les corresponde.

 

Los parques infantiles son espacios esenciales para las familias, pero también una muestra de cómo una ciudad gestiona su espacio público y responde a las necesidades de sus ciudadanos más jóvenes. En Mataró, la red de parques infantiles cuenta con 120 áreas repartidas por todo el municipio y un total de 515 elementos de juego, de los cuales 138 están adaptados para niños con diversidad funcional. A pesar de este despliegue, el mantenimiento y las condiciones de algunos de estos espacios han sido motivo de queja por parte de la ciudadanía.

Ricis descarta que se prioricen los perros por encima de la infancia

El concejal de Verde Urbano, Espacio Agrario y Forestal, Brigada Municipal y Mantenimiento, José Antonio Ricis, admite que todavía hay margen de mejora. “Nuestro objetivo es siempre tener la ciudad al día, también los parques infantiles. Esto requiere inversión, y como los recursos no son infinitos, siempre hay que priorizar”, afirma. El Ayuntamiento ha establecido criterios claros para determinar las intervenciones en los parques infantiles. Según Ricis, “los criterios que se tienen en cuenta son el cumplimiento de la normativa recomendada, que los elementos de juego deban cambiarse o repararse por la intensidad de uso -y por lo tanto, siempre se tiene presente cuáles son las áreas que más se utilizan-, y las necesidades de la ciudadanía”. Esta metodología busca garantizar que los recursos se destinen allí donde son más necesarios y urgentes.

Un aspecto destacado es la accesibilidad universal, que no siempre es fácil de implementar en espacios que utilizan arena como pavimento. “La arena tiene ventajas a nivel de desarrollo psicomotriz y no es accesible. Por lo tanto, se busca un equilibrio y se trabaja para que haya zonas accesibles en todos los barrios”, explica el concejal.

900.000 euros para mejorarlos

Durante los próximos meses, el Ayuntamiento invertirá 900.000 euros en la mejora de estos espacios. Ricis asegura que las actuaciones se seleccionan según los criterios ya mencionados y destaca que “se priorizan las actuaciones según la urgencia de las mismas”.

El presupuesto dedicado a estos espacios, aunque estable, podría aumentar en función de las necesidades detectadas y de los recursos extraordinarios que se puedan conseguir. “La dotación presupuestaria es más o menos fija, pero en función de las necesidades y los recursos extraordinarios que se consigan, se puede ver aumentada según los años”, apunta el concejal.

La ciudadanía juega un papel fundamental en la mejora de los parques infantiles. Ricis explica que “en todas las áreas nuevas se realiza un trabajo de participación con las Asociaciones de Vecinos correspondientes”. Además, el Ayuntamiento también recoge las aportaciones del Consejo de Infancia, que en el curso 2023-24 hizo llegar sus conclusiones sobre la mejora de estos espacios.

Por otro lado, el concejal anima a las familias a colaborar comunicando las incidencias por los canales habilitados y haciendo un buen uso de las instalaciones. “Haciendo un buen uso de las instalaciones y comunicando las incidencias al Ayuntamiento por los canales habilitados”, concluye Ricis, “podemos contribuir entre todos a mantener unos espacios seguros y agradables para todos”.

El Consorcio de Promoción Turística del Maresme tiene una campaña para dar a conocer los parques infantiles más destacados de la comarca, con el objetivo de atraer familias a visitarlos y fomentar el turismo familiar. Sorprendentemente, ningún parque infantil de Mataró, la capital de la comarca, figura en esta selección, hecho que ha generado cierta controversia entre los vecinos y ha puesto de manifiesto las carencias de la ciudad en este ámbito.

A pesar de contar con una red de 120 parques infantiles, Mataró no ha conseguido que ninguno de sus espacios sea reconocido por el Consorcio. Este hecho evidencia algunas carencias en los parques de la ciudad, que, según los mismos responsables municipales, aún tienen “margen de mejora”.

Mientras que otros municipios del Maresme han apostado por crear parques con diseños innovadores, zonas temáticas o espacios totalmente accesibles, Mataró mantiene una oferta más funcional y tradicional.

Entre los parques infantiles que sí han sido seleccionados por el Consorcio, destacan algunos que sobresalen por su innovación, diseño o características únicas:

• Parc Francesc Macià (Malgrat): Conocido como el parque temático del Maresme, este espacio ofrece estructuras gigantes en forma de pasteles, flores y otros elementos de fantasía. Además, cuenta con zonas adaptadas para niños con diversidad funcional y una gran variedad de juegos que estimulan la imaginación.

• Parc de Can Muntanyà (Caldes d’Estrac): Situado en un entorno natural privilegiado, este parque combina juegos infantiles con un espacio que fomenta el contacto con la naturaleza. Su ubicación es atractiva al lado de una zona boscosa y con vistas al mar.

• Parc del Montnegre i el Corredor (Sant Celoni): Aunque no es un parque infantil en el sentido clásico, el Consorcio lo promociona como una opción ideal para familias con niños, gracias a los itinerarios adaptados y las zonas de esparcimiento integradas en el entorno natural.

• Parc de la Plaça de les Barques (Premià de Mar): Este parque destaca por su diseño moderno, con juegos interactivos, zonas de agua y espacios accesibles para todos los niños.