Un brote de coronavirus puede haber provocado una quincena de muertos a una residencia de Mataró

Saltan las alarmas por la situación vivida a la residencia de gente mayor Gatassa​ de Mataró por la elevada cifra de defunciones entre los residentes durante los últimos días. Según ha podido saber Capgros.com de fuentes conocedoras del caso, la cifra, a fecha de lunes día 6, podría elevarse a una quincena de de defunciones, y se sospecha que la causa probable de una parte importante de los casos puede ser un brote de coronavirus. Los datos no han sido confirmadas oficialmente por la Generalitat, de quienes depende lo centro geriátrico, a pesar de que reconocen que la situación en este equipamiento es "muy complicada". Por la sev banda, fuentes del centre geriátrico consultadas por este medio matizan que los casos no serían tan recientes, sino que la quincena de defunciones se habrían producido desde principios de marzo. Desde el consistorio mataroní, pero, no ven nada claras estos datos puesto que no los cuadra con la información que disponen por otros canales, se muestran muy preocupados por la situación, acusan a la Generalitat de descoordinación y de carencia de respuesta y han pedido urgentemente la medicalització de la residencia. El centro actualmente cuenta con cerca de 110 residentes y está gestionado por el Departamento de Asuntos Sociales.

El pasado viernes, día 3, en un encuentro telemático con periodistas, el alcalde de Mataró, David Boto, aseguraba que la situación a las cerca de 40 residencias geriàtriques públicas y privadas de Mataró estaba controlada y que nohabía ningún brote de covid-19, a pesar de que sí se tenía constancia de al menos una defunción causada por el virus a la residencia Gatassa. Parecía, por lo tanto, que en la capital del Maresme no se estaban viviendo crisis como las sufridas a municipios como Badalona, Santa Coloma de Gramenet u Olesa, donde ha habido brotes que han provocado decenas de defunciones a centros geriátricos. Durante este fin de semana, pero, el panorama ha cambiado totalmente y se ha hecho mucho más preocupante, tal y cómo apuntan fuentes del Ayuntamiento.

La situación ha empeorado desde el pasado viernes y la Generalitat "no parece tener ningún control sobre el queestá pasando", según fuentes del Ayuntamiento

A partir del mismo viernes por la tarde, el Ayuntamiento empezó a recibir informaciones tanto desde la propia residencia Gatassa cómo de familiares de residentes que señalaban un empeoramiento de la situación. Desde entonces, y durante todo el fin de semana, el alcalde ha mantenido conversaciones con representantes del departamento de Asuntos Sociales, el departamento de Salud y con Protección Civil, llegando a la conclusión desde buen principio que desde la Generalitat "no parece tener ningún control sobre el queestá pasando", según apuntan fuentes municipales.

Boto dirigió sábado dos cartas al consejero de Asuntos Sociales, Chakir El Homrani, y a la consejera de Salud, Alba Vergés, para reclamarlos información al por menor, pero no ha recibido respuesta. El alcalde también se ha mantenido en contacto con el Delegado del Gobierno de la Generalitat a la provincia de Barcelona, Juli Fernàndez, a quien ha transmitido su preocupación y malestar por el que, a tenor suyo, es una clara carencia de coordinación entre Salud y Asuntos Sociales en la gestión de ámbitos como las residencias geriàtriques. Fuentes municipales apuntan que los dos departamentos "se están pasando la pelota" sin facilitar información sobre los hechos que se viuenc en centros geriátricos como el de Gatassa, sin asumir responsabilidades ni dar una respuesta adecuada.

Medicalització y desinfección de la residencia

El alcalde ha pedido oficialmente que se medicalitzi la residencia Gatassa, porque reciba el tratamiento de centro sanitario y se pueda atender sus residentes siguiendo protocolos propios de centro médico. También ha reclamado que se desinfecten las instalaciones. Desde el consistorio se tienen dudas que a residencias como esta se hayan aplicado todas las medidas necesarias para intentar parar el posible brote, por ejemplo haciendo un correcto aislamiento de los pacientes que han contraído el virus. También tienen constancia que hasta ahora sus profesionales han trabajado sin todo el material de protección necesario. A pesar de que oficialmente Gatassa, como centre geriátrico asistencial, cuenta con más de 200 plazas, hoy hay poco más de un centésimar de usuarios, puesto que un número elevado de los residentes presentan un alto grado de dependencia y la plantilla, que depende de Asuntos Sociales, no es bastante elevada para atender a un número más alto de residentes. En los últimos años, varias fuerzas políticas del consistorio y también entidades vecinales han reclamado más dotación de presupuesto y de personal por este centro. La semana pasada, a raíz de tener conocimiento de una defunción por covid-19 a Gatassa, la AVV de Cerdanyola reclamó que se habilitara la cuarta planta, ahora sin uso, para aislar los pacientes contagiados. Desde entonces, pero, la situación se ha agravado notablemente.

Por @matarocat .@CONFAVC @fav_mataro @EP_mataro @totmataro @MatAudiovisual pic.twitter.com/haghbo2crh

— Aavv de CERDANYOLA De Mataró (@avvdeCERDANYOLA) April 2, 2020

Desde Asuntos sociales de la Generalitat no han facilitado el número exacto de víctimas mortales por coronavirus a la residencia Gatassa, puesto que los datos que hacen públicas son por demarcaciones territoriales sin desglosar cada caso de centre geriátrico. "Somos conscientes que la situación en este centro es muy complicada", reconocen, pero, fuentes del departamento, que han anunciado que se está preparando "un plan de acción específico". Uno de los primeros pasos del cual sera la desinfección de las instalaciones de la residencia, que está previsto que se lleve a cabo este mismo lunes. Hay pendiente una reunión entre los departamentos de Asuntos Sociales y de Salud de la Generalitat para acabar de abordar la situación. Por otro lado, el 1 de abril pasado la Generalitat envió a Gatassa material diverso de protección para los profesionales, como por ejemplo 280 mascaretes, 280 guantes, 150 batas y 8 ojeras.

La misma consejería informó ayer domingo que desde el 15 de marzo han muerto por coronavirus al menos 702 personas a residencias de gente mayor de Cataluña, cosa que aumenta en 56 las defunciones comunicadas en las últimas 24 horas. Además, según los datos facilitados por las residencias al Departamento, en total hay 1.631 usuarios que tienen diagnóstico de coronavirus, ante los 1.261 informados este sábado (370 más). La semana pasada, el presidente de la Asociación Profesional Catalana de Directores/nada de Centros y Servicios de Atención a la Dependencia (ASCAD), Andrés Rueda, aseguraba que las muertes por coronavirus a residencias y geriátricos son "mínimo un 50 más" de la cifra oficial, porque "hay muchos abuelos a quienes no se los está haciendo la prueba y no entran en la contabilidad".

El Gobierno anunció la semana pasada varias medidas para hacer frente al coronavirus a las residencias. El ejecutivo ha puesto en marcha el Pla Clínica Social -con 128 personas trasladadas a mutuas de trabajo-, y la activación de 500 voluntarios de formación profesional. También se ha reforzado de material y personal a los centros de gente mayor: 76.000 equipos de protección individual, 27.698 mascaretes FFP2, 29.021 mascaretes quirúrgicas, 9.362 batas, 50.669 guantes y 1.593 ojeras de protección.