Las playas de Mataró arrancaron temporada con el paso a la nueva normalidad después de una gestión muy prudente del acceso a las mismas durante el confinamiento. "Nuestro gran objetivo es que Mataró transmita toda la confianza en el uso de las playas para los ciudadanos locales y para los muchos que venden de fuera", asegura el Alcalde David Boto, que señala la importancia de "respetar los protocolos de seguridad y ser muy responsables con elementos como la distancia entre personas" para convertir el litoral en zona segura.
El miércoles 1 de julio entran en funcionamiento los últimos servicios como el de baño adaptado para personas con problemas de movilidad. Se ofrece un servicio de cesión y posterior desinfección de las sillas anfibias para quienes necesite utilizarlas, concertando el uso previamente o desde el cenador de 27 m² que se ha instalado en la playa del Varador.
Accesos y aforos limitados
Precisamente para asegurar que la experiencia de bajar a la playa sea el máximo de satisfactoria por los usuarios, el Ayuntamiento ha contratado 30 personas (28 se encontraban en situación de paro y 2 con ocupación parcial) que, hasta el 13 de septiembre, realizan las tareas de informadores a las playas, supervisan el acceso y los aforos y recuerdan a los bañistas las medidas de distancia social y seguridad que hay que mantener para la seguridad de todo el mundo. El recibimiento por parte de los bañistas de este nuevo servicio está siendo muy bueno, según los primeros balances y experiencias.

Vista de la playa de Ponente
Hay 10 puntos de acceso a las cuatro playas, sumando rampas y passeres hasta la arena
Se ha establecido que habrá 10 puntos de acceso entre las cuatro playas, sumando rampas y pasarelas que conducen hasta la arena. Si en algún momento se supera el aforo previsto en alguna de las playas el acceso quedará cerrado y se recomendará a los bañistas que se dirijan a aquellas que tengan espacio disponible. Esto ha ocurrido en los últimos dos fines de semana en la playa de Poniente, la de menor capacidad. Los fines de semana, los informadores controlan el número de personas que entran a las playas y pasan estos datos mediante teléfonos móviles a una aplicación informática que permite hacer el seguimiento del aforo desde el web www.visitmataro.cat, con enlace también desde www.mataro.cat.
Las playas y sus aforos
Mataró tiene cuatro playas abiertas al baño que configuran un litoral privilegiado con cuatro espacios de características diferentes. Hay que recordar que en la playa de Pekín , la quinta, nunca ha sido permitido el baño, no dispone de ningún servicio y permanecerá cerrada durante toda la temporada por carencia de condiciones sanitarias para bañarse al encontrarse dentro del recinto portuario.
Para garantizar el buen estado de los equipamientos y su salubridad, Mataró tiene cura de forma activa y diaria de sus playas. Así, la limpieza de la arena se hace a diario y hay la habitual presencia de papeleras, lavabos públicos con refuerzo de limpieza y duchas que son desinfectadas tres golpes al día. También está en marcha el servicio de megafonía para recordar a la población la necesidad de cumplir las normas y recomendaciones. Los chiringuitos de restauración, helados y bebidas ya operan a pleno rendimiento y más ocupación de playa para garantizar la distancia entre mesas.
Los chiringuitos de restauración, helados y bebidas ocupan más espacio para garantizar la distancia entre mesas
Hay que recordar que con la nueva normalidad se establece en toda la playa una distancia física entre personas que no convivan de un mínimo de 4 metros a la arena. En el agua hay que mantener una distancia mínima entre personas que no convivan de 2 metros. Se recomienda dejar libres los primeros 6 metros del borde del mar para facilitar la entrada y salida al agua; así como no pasear, pararse ni jugar al lado del mar.
Protección de las dunas de la playa del Varador
Otra de las novedades de esta temporada es que se ha protegido con vallas y cuerdas el espacio de un total de 1,5 hectáreas de vegetación dunar a la playa del Varador. De este modo esta zona queda cerrada para la preservación de su flora característica, tal y cómo se había aprobado al Pleno Municipal. El regidor Xesco Gomar explica que "se trata de una importante actuación para preservar ambiental y paisajísticamente un activo propio de la playa del Varador cómo es la vegetación de estas dunas, que no son naturales pero que ya hace 20 años que forman parte de la zona". El Ayuntamiento pide la complicidad y el civismo de la ciudadanía para la preservación de este espacio como reserva fuera de la afectación de personas y animales.
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