estás seguro que han cerrado? Qué lástima. Nosotros que queríamos venir a ver TheLiberty !. Son las seis de la tarde y a la cartelera de los cines Oscar todavía se anuncia que se podrá ver, justo a esta hora, la película protagonizada por Johnny Depp. Pepi Ortega y Maria Fuentes, dos vecinas del barrio, querían ir al cine a la sesión de las ocho y cuarto y su desilusión al conocer la noticia ha sido bastante grande. Podrían haber avisado con más tiempo y así lo haguessim planeado. Las cosas no se hacen de este modo!, exclama indignada Fuentes. En el mismo sentido se expresa Ortega, quien no acaba de entender porque han colocado un cartel de Cercado y no se indica claramente que Oscar no abrirán más: Además de hacerlo de un día por el otro, se confón a la gente. Y ahora los que no tenemos coche como lo haremos para ver los estrenos?, se pregunta esta ciudadana.
La mayoría de ciudadanos no conocían esta tarde que los cines Oscar, que este año hubiera cumplido cuatro años a la ciudad, habían cerrado definitivamente. Su cierre puede suponer que mucha menos gente circule por la zona y, por lo tanto, puede empujar a un descenso de los negocios cercanos al cine. Según la responsable del Frankfurt-Cervecería El Foro, Antonia Merchán, habrá que esperar un tiempo para observar las repercusiones reales: No escondo que la primera reacción fue de pesimismo pero creo que podemos salir adelante el negocio sin la necesidad de un cine al lado. Merchán se ha querido solidarizar con las nueve trabajadoras del cine, unas grandes amigas y assidues al bar. No hay derecho que echen a las trabajadoras de un día por el otro, sin avisar. El problema del cine era de mala gestión puesto que no se hacía suficiente promoción; cuando las películas eran buenas las salas estaban llenas, ha criticado.
Por el contrario, el responsable del restaurante japonés Tokyo-Tono, Wang Paw, quien hasta hoy no ha conocido la noticia, no considera que el adiós de Oscar de la zona suponga un gran dolor de cabeza. Los restaurantes de no tenían su clientela gracias al cine. Si alguien si que se nutría de la gente que iba al cine, ya hace tiempo que hubiera cerrado, ha explicado Paw.
El secretario general de la Unión de Tenderos, Josep Filbà, también ha lamentado el cierre de las salas del centro. "Es una muy mala noticia", ha dicho Filbà, que asegura que esta situación "nos preocupar porque la oferta de libre y de ocio al centro no sólo no crece, sino que mengua". Según Filbà, el cierre de los cines no tendrá un efecto "directo" a nivel comercial, puesto que los horarios de las tiendas y del tiempo de ocio no siempre coincide. "Afectará sobre todo a la vitalidad de la hosteleria", pronostica Filbà.
El monopolio del Mataró Parco
Sea como fuere, el cierre de los cines Oscar comporta que, sin tener en cuenta el Monumental, las salas del Mataró Park monopolicen el mercado a la capital del Maresme y sus cercanías y, al mismo tiempo, confirma la tendencia negativa del sector audiovisual, iniciada con el cierre del Blockbuster a principios de abril. "Cómo puede ser que una ciudad como Mataró tenga un solo cine?", reflexiona Maria Fuentes. A pesar de todo, no todo el mundo ve que el fin de Oscar sea negativo. Los cines también se rigen por la ley del mercado y si cierran es que no podían aguantar, opina Humbert Martin, que ha conocido la noticia justo después de interesarse por los horarios de Ice Age 2. Pues ya iremos al Mataró Park que así podremos ir a la sala de videojuegos mientras esperamos que empiece, dice a su lado su hijo, Adrià Martín.