Tres euros pueden sonar poca cosa, pero también pueden ser una clara evidencia de carencia de sensibilidad. El Estado español ha aplicado desde este mes de octubre una nueva subida de la cuota de los autónomos, este golpe de un 0,3%. Esto significa que se pagarán cerca de tres euros más mensuales, pero el movimiento llega con sorpresa: cómo que esta medida se tenía que aplicar en enero, ahora se pide que se paguen los 26 euros que no se han pagado de los meses anteriores. Por un lado, el objetivo es poder financiar las prestaciones que los autónomos reciben cuando están de baja o han tenido que cesar la actividad, pero por otro lado, se pone en marcha precisamente cuando miles de ellos han perdido buena parte de los ingresos.
La asociación de Autónomos de Cataluña ha pedido, en declaraciones a Raigo1, que esta subida y el recargo de todos los meses anteriores sirvan para incrementar también las prestaciones. Según explica, en el caso "de autónomos que desgraciadamente desde el estado de alarma (desde el 14 de marzo) están cobrando una prestación por cese de actividad, también reclamaremos que se los ingrese con efectos retroactivos la diferencia de este porcentaje. Lo tenemos que pagar, pero también reclamamos que nos lo vuelvan y que nos lo ingresen". También se pide que se cobren los pagos pendientes de manera fraccionada.
La medida ha levantado las protestas del colectivo, como lo del presidente del ATA, Lorenzo Amor, que la semana pasada calificaba esta actualización "de estocada injustificable con la que está cayendo". "Pagarán 30 euros más en su cuota al aplicar una subida de tipo que tendrían que haber hecho en enero. Aplican un subida con carácter retroactivo en el peor momento, qué error", se exclamaba en una piada al Twitter.
"No es el momento de reformar la situación de los autónomos"
Por otro lado, la Cámara de comercio de Barcelona se opone a la aplicación de la reforma en el sistema de cotización de los autónomos, una propuesta que el gobierno español trae trabajando desde hace semanas y que obligaría los autónomos a cotizar en función de sus ingresos. Según el organismo, el nuevo sistema puede conducir a un sistema "más justo", pero considera que "ahora no es momento para aplicarlo". "Plantear la reforma en el escenario actual denota más bien un afán recaudatorio", ha señalado en un comunicado. Tal como apunta el ente, el nuevo sistema calcularía las cotizaciones utilizando como referencia los ingresos de 2019. "Esto comportaría que un autónomo afectado por una bajada de facturación pueda tener un índice impositivo superior", ha apuntado el ente.
Comentarios