Capgròs
Saterra Joiers dirá adiós el próximo 27 de junio después de una vida dedicada a las joyas. Empresa familiar fundada hace más de 45 años, el 1977, ha acompañado durante más de cuatro décadas a mataronins y mataronines de todas las edades que han querido encontrar el regalo ideal y la mejor joya posible en cualquier de las las etapas de la vida. Saterra se encuentra en liquidación de producto y cerrará las ventas el próximo 22 de junio, pero dejará unos días más para gestionar reparaciones y encargos pendientes. Será el 27 de junio, jueves, cuando desde el establecimiento piden que amigos, familiares y clientes pasen a decir un último adiós y brindar después de tantos años.
Dedicada al sector de la joyería y la relojería, ha sido un referente tanto a nivel local cómo catalán. Su historia es la de una familia de seis hermanas, de las cuales la mitad acabaron trabajando en la tienda. La Mercè, la primera en empezar, se ha encargado de la atención al cliente y la gestión de compras y logística. La Nuri ha supervisado las finanzas, mientras que la Gema ha gestionado la comunicación a través de las redes sociales y las ventas en linea. Más recientemente, la Cristina, hija de Mercè, se unió al equipo para reforzar la atención al cliente y el control de stocks. A todas ellas, desde hace años, no puede faltar la Salima, que ha trabajado a su lado siendo también una cara visible e indistinguible de Saterra.
De Playa de Aro a Mataró
La primera aventura con las joyas estuvo en Playa de Aro, una época de auge para aquella localidad. En noviembre de 1977 aterrizó a Mataró, donde Saterra empezó en un local que necesitaba una renovación completa en medio de la ciudad. Con una inversión inicial significativa y el apoyo de Raimon Jaumandreu, Saterra empezó a andar en Mataró. Los primeros años fueron muy activos, atrayendo tanto gente joven cómo sus familias.
Con el paso del tiempo, Saterra fue ampliando su inventario, incluyendo marcas de relojes de lujo de todo tipo. La expansión llevó a la apertura de una segunda tienda a Granollers en 1981, que permaneció abierta hasta el 2017. La tienda original en Mataró cambió su imagen hace 23 años creando un espacio más moderno y acogedor.
La historia de Saterra está marcada por la superación de varios desafíos, incluyendo la pandemia de la COVID-19. A pesar de los cambios, estos años han sabido adaptarse con fuerza en las redes sociales, especialmente Instagram, para mantener el contacto con los clientes y asegurar ventas rápidas y eficaces incluidas fuera de la ciudad.
El cierre de Saterra no es fruto de una crisis, sino una decisión para disfrutar de un merecido descanso después de muchos años de servicio. El 22 de junio será el último día de ventas. Esta decisión llega en un momento dulce, días en los que su fiel clientela ha mostrado un gran apoyo, no solo comprando, sino con clientes y clientas que simplemente se han acercado para expresar su agradecimiento y dar un beso y un abrazo de despedida.
Con el adiós de Saterra se cierra un capítulo de dedicación y pasión por la joyería, dejando un legado de calidad y servicio en la memoria de todos los que han pasado por la tienda.
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