En los últimos meses, muchas personas han recibido llamadas de comercialitzadores de electricidad, a menudo fuera de horas, proponiendo ahorros en la factura de la luz. Estas llamadas, que a menudo ofrecen descuentos atractivos, se han intensificado recientemente, puesto que las compañías saben que ahora es un buen momento para revisar las tarifas y captar nuevos clientes.
La crisis de precios de 2022 supuso un antes y uno después en la manera en que los clientes afrontaban un cambio de compañía. Mucha gente se vio forzada a gestionar su contrato eléctrico para optimizar los costes, cosa que rompió muchas barreras. Josep Graell, socio director de la consultora Grupo Trebol Energía, explica que "antes la gente tenía mucho miedo a cambiar de compañía, pero los precios desorbitados de entonces forzaron muchos a buscar alternativas". Los datos de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) lo confirman: "Cada año, el 20 % de los clientes cambian de comercialitzadora; hace dos o tres años, esta cifra era del 10 %".
Buen momento para buscar un ahorro en la tarifa
Aquellos que cambiaron de tarifa el 2022, en el peor momento de la crisis, son los que ahora pueden ahorrar más renegociando su tarifa, puesto que los precios se han moderado significativamente. Las comercialitzadores están haciendo campañas agresivas para captar estos clientes potenciales, ofreciendo nuevas condiciones que pueden reducir considerablemente la factura mensual.
Desde los picos de 2022, cuando los precios medianos superaban los 300 euros por MWh, se ha pasado a un comienzo de año con precios por debajo de los 40 euros por MWh, y el junio se mantiene de media en los 50 euros por MWh. Esta disminución se debe de, en parte, al incremento del uso de fuentes renovables y un consumo moderado debido a las buenas temperaturas.
Mercado libre o regulado?
Actualmente, hay muchas ofertas competitivas al mercado libre, que son similares a los precios del mercado regulado. La decisión depende de las preferencias del cliente: si quiere despreocupar-se de las horas de consumo y tener un precio único durante todo el día (cómo ofrece el mercado libre) o si prefiere ajustar el consumo a las horas más económicas (cómo permite la tarifa del mercado regulado, donde los precios varían cada hora).
Desde principios de año, los precios de la electricidad para los clientes del mercado regulado (tarifa PVPC) ya no dependen exclusivamente de los precios del mercado mayorista, puesto que ahora una parte está indexada a los precios futuros. Esta reforma, aprobada por el gobierno después de la crisis de 2022, tiene como objetivo evitar la volatilidad de los precios. Josep Graell destaca que, a pesar de que esta indexación a futuros puede haber supuesto un incremento relativamente pequeño (unos 5 euros por factura durante los primeros seis meses del año), puede ayudar a contener los precios si vuelven a subir en el tercero o cuarto trimestre.
Estudiar al por menor las ofertas
Para valorar adecuadamente las ofertas, es importante no solo fijarse en el precio por kWh, sino también en el precio por potencia. A veces, un precio por kWh más económico puede quedar en nada si aumentan el término de potencia, que se paga independientemente del consumo.
Las asociaciones de consumidores recomiendan tomar nota de los datos, estudiarlas con calma y hacer los cálculos necesarios antes de decidirse por una oferta. Esther Lorente, delegada de la OCU a Cataluña, señala que "el tema de la electricidad es muy complejo, y a veces estas llamadas comerciales son un poco agresivas, intentando que tomes una decisión inmediata que quizás no es la mejor para tú".
Para hacer una valoración adecuada, se pueden utilizar comparadores cómo el de la CNMC, disponible en su web, que pueden ayudar a encontrar la oferta más ventajosa.
Fuente: ccma.cat/324
Comentarios